La cosmovisión de los aborígenes andinos supone al arte no como un concepto en sí, sino como la vía de comunicación espiritual con sus ancestros o las deidades: explorar la belleza para acceder a la comunicación con lo divino.
La IV Bienal de Arte Indígena abre un espacio para ver cómo las manifestaciones se han desarrollado y han asumido tambien los lenguajes que devienen de la contemporaneidad.
Sin embargo cada pieza parece resumir una cosmovisión, la forma de ver el mundo desde el sentir indígena; un sentir que sigue abriéndose al sincretismo.
La muestra de artes plásticas es una parte de esta bienal que también programa artes escénicas y musicales. La exhibición esta en la Casa de la Cultura Ecuatoriana. Esta es una exhibición que debe visitar porque:
1.- Abre la reflexión y la discusión sobre las categorías estéticas exploradas por estas artes.
2.- Supone la presencia del arte indígena como una práctica distinta a las postuladas por las visiones occidentales.
3.- El visitante puede conocer el resto de actividades que se realizan dentro de la Bienal, en distintos espacios.