No siempre fueron los libros en la vida de Antonio Sacoto. En su natal Biblián fueron las travesuras infantiles y en sus años mozos se dedicó al baloncesto y a la fiesta. Pero cuando dejó el austro ecuatoriano para formarse en los Estados Unidos , ya cupo en él otra vocación: la literatura escrita por sus coterráneos; la inmersión en esas novelas y cuentos, el interés por esos personajes.
Hoy por hoy, Sacoto es un río de conocimientos y de lecturas, donde siempre sale a flote su ojo crítico. Es poseedor de una formación y una disciplina que, esta noche, lo suman a esa pléyade de intelectuales y escritores que componen la Academia Ecuatoriana de la Lengua.
Para recibir tal nombramiento y para presentar su reciente libro ‘La narrativa de Azuay y Cañar’, Sacoto vino desde Nueva York, alejándose por un momento de su cátedra universitaria. Interrumpimos su andar por Quito y nos entregamos a la charla. Antonio -como lo tratamos en confianza- habla con una calma vestida de seriedad. Así, vamos hilvanando sus lecturas y las temáticas en las que ha profundizado.
Del indigenismo
Su interés por las letras llegó junto a una preocupación por el indigenismo. Así su primer libro publicado fue ‘The indian in the ecuadorian novel’, donde trató a Jorge Icaza, en la novela indigenista realista, y a Juan León Mera, en la novela indianista romántica. Luego el tema fue extendiéndose hacia las letras de Bolivia, Perú, México, Guatemala… países de ancestro indio, de entre los cuales Ecuador se distingue con algunas de las mejores obras del género, como “‘Huasipungo’ .
En la línea que va desde Mera, pasando por Icaza, Sacoto habla del ‘neoindigenismo’, en la amalgama del boom y el postboom. Allí menciona a Gustavo Alfredo Jácome, con ‘Porqué se fueron las garzas’. Los ensayos que Sacoto dedicó a estas piezas conjugan el ensayo literario con visiones propias de las ciencias sociales.
De la literatura ecuatoriana
El ojo avizor de Antonio Sacoto ha leído a tantos escritores ecuatorianos, que elaborar una lista de cuanto autor pasa por su mente es tarea para otro espacio. Los nombres y las obras se hallan en sus libros que tratan sobre la novela y el cuento, siempre delimitándose por períodos temporales o criterio generacionales.
Sin embargo en sus evocaciones y reflexiones hay nombres que se repiten: Iván Égüez, Raúl Perez, Modesto Ponce, Javier Vásconez, Carlos Arcos, Byron Rodríguez, Eliécer Cárdenas o Jorge Dávila Vásquez . Escritores a quienes conoció después de que los estudiase y criticase; cuya obra difunde también en otras latitudes, y a quienes busca cuando la vida lo trae de vuelta por estos lares.
De la crítica
Antonio Sacoto considera tres elementos clave en una narración, durante sus lecturas: la intensidad con la que se mantiene el interés de principio a fin; el manejo de un lenguaje expresivo y poético; y el impacto del tema, que encierra un asunto que interese y personajes que convenzan.
Hay lecturas sociológicas o posturas políticas que inciden en la crítica, pero -considera Sacoto- eso no limita, sino enriquece; “obviamente, el crítico debe permanecer con una visión clara y no caer en el panfleto”, aclara.
Asimismo, Antonio ha ido creciendo a través de las escuelas literarias. De estudiante se delineó por la estilística, luego por el estructuralismo, después por corrientes más actuales; al punto de colegir lo mejor de cada una.
A sus ojos conocedores, ninguna escuela es obsoleta; pues, aunque una se ponga en boga, hay principios que vienen de la ‘Poética’, de Aristóteles.
Si bien la academia es el ‘modus vivendi’ de la crítica, Sacoto considera también a lectores sabios que lejos de las instituciones buscan conocer mejor la literatura; o ve en el periodismo una oferta de crítica, que se basa en la síntesis para dar a conocer una obra.
La crítica para él, además de estudio y análisis, es un acto creativo. Y si Sacoto se enfrenta a una obra mediocre o mala, prefiere prescindir de ella, no destrozarla.
Antonio Sacoto se incorpora hoy a la Academia Ecuatoriana de la Lengua y lo hace con una disertación, sobre a quien considera figura descollante de las letras nacionales, el título de su ponencia lo dice claro: La cultura y la lengua en la obra de Juan Montalvo.
HOJA DE VIDA
Antonio Sacoto Salamea
Nació en Biblián, Cañar, el 30 de noviembre de 1 932.
Hizo su carrera universitaria en los EE.UU., hasta recibir el Ph.D. en la Columbia University of New York.
Ejerce la cátedra en la City University of New York.
Entre sus libros están ‘Juan Montalvo, el escritor y el estilista’, ‘14 novelas claves de al literatura ecuatoriana’ o ‘El cuento ecuatoriano 1970 – 2010’.