Corte de Argentina absuelve a una mujer que estuvo dos años presa por aborto

La despenalización del aborto es una de las recomendaciones que la Cedaw le dio al Ecuador. Foto: Pixabay

La despenalización del aborto es una de las recomendaciones que la Cedaw le dio al Ecuador. Foto: Pixabay

Belén, de 27 años, fue sentenciada a 8 años de cárcel por homicidio agravado. Foto: Pixabay

Una mujer argentina que había sido condenada a 8 años de prisión y pasó más de dos años en la cárcel por un presunto aborto fue absuelta este lunes 27 de marzo del 2017 por la Corte Suprema de la provincia de Tucumán, norte del país.

Belén, de 27 años, había sido excarcelada el 19 de agosto pasado en la ciudad de Tucumán, tras pasar más de dos años en la cárcel sentenciada por homicidio agravado, luego de protestas y movilizaciones en su apoyo de movimientos de mujeres y organizaciones de derechos humanos, entre ellas Amnistía Internacional.

“Me siento feliz. Ahora puedo respirar tranquila y saber que se hizo justicia. Porque yo jamás hice lo que ellos pensaron (provocarse un aborto)”, dijo Belén, un nombre falso para resguardar su identidad, al portal de Prensa Alternativa APA!.

La Corte Suprema de Justicia de Tucumán resolvió por unanimidad dejar sin efecto la sentencia a 8 años de prisión por homicidio agravado, dictada por una Cámara penal en abril de 2016.

La mujer es una trabajadora de bajos recursos que tuvo que esperar por más de dos años su juicio tras las rejas.

La historia comenzó con su ingreso a un hospital público de San Miguel, capital de Tucumán, a 1 200 km al norte de Buenos Aires, en marzo del 2014.

Belén tenía dolores abdominales y un aborto espontáneo en curso, pero ella explicó que desconocía que estaba embarazada.

Según la defensa, horas después de que Belén abortara, en el hospital encontraron un feto de 32 semanas en el inodoro de un baño. Le adjudicaron el hecho como un crimen, pero sin pruebas de ADN y no quisieron escucharla.

En Argentina, no es legal la interrupción voluntaria del embarazo salvo cuando está en peligro la vida de la madre o en caso de violación.

Diez entidades defensoras de derechos humanos, entre ellas Amnistía Internacional, se presentaron como amicus curae, después de la condena, para apelar ante el alto tribunal. Consideraron que se trató de un caso “de violencia de género de cuño institucional”.

“Gracias inmenso a La Mesa para la Libertad de Belén, sin las compañeras esto no pasaría !!!!! Somos invencibles...”, escribió en su portal de Facebook la abogada Soledad Deza, de la organización no gubernamental Católicas por el Derecho a Decidir, que asumió su defensa luego de que el juicio hiciera público el caso.

Suplementos digitales