Un conjunto de tiburones, entre ellos el martillo, está incluido entre las más de 40 propuestas para incluir en la lista roja. Estas son analizadas por 175 representantes de gobiernos que participan, entre el sábado 13 y el jueves 25, en la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies (Cites), en Doha, Qatar.
En el grupo en riesgo también se incluye a un escarabajo endémico de Bolivia y que tiene mucha demanda entre los coleccionistas japoneses.
También está el Palo de Rosa de Brasil, una especie explotada por su aceite. Además, está el Palo Santo, de los bosques secos del Chaco, cuya madera tiene gran demanda comercial.
Asimismo, desde América surgieron propuestas como la de Palau y EE.UU. sobre tiburones que se pescan como alimento. Honduras y México proponen incluir a la Agalychnis, una rana arborícola originarias de México, América Central y del Sur. La deforestación y el drenaje de zonas húmedas para la agricultura están entre sus amenazas.
Bernardo Ortiz, director regional de Traffic-América del Sur, se mostró seguro de que “todas entrarán en el grupo protegido. Pero la discusión más difícil será sobre los tiburones, ya que hay países que defienden su no inclusión al afirmar que la situación de los mismos no responde a un problema de conservación, sino de manejo pesquero”.
La Cites es un acuerdo internacional entre gobiernos para evitar que el comercio internacional de animales y plantas silvestres no sea una amenaza para su supervivencia. Tiene dos anexos, el I están clasificadas las especies cuya exportación está prohibida, y en el II las que necesitan un permiso que certifique que son explotadas cuidando de proteger la especie. Regula o prohíbe la comercialización de 34 000 especies, entre ellas 2 000 plantas y 5 000 animales.