Restaurantes de Quito y Guayaquil participaron en la campaña cuyo fin es conservar la concha negra evitando la distribución en sus locales de estos animales cuyo tamaño no supere los 4,5 centímetros. Foto: EL COMERCIO
74 restaurantes de Quito y Guayaquil se unieron en una campaña por la conservación de la concha negra. El mensaje: “No consumir conchas de menos de 4,5 centímetros”, llegó a casi tres millones de personas a través de redes sociales. Los resultados de la iniciativa, que se inició el año pasado, fueron presentados al público.
Verónica Alvarado, gerente de Desarrollo de Programa del Instituto Humanista para la Cooperación con los Países en Desarrollo (Hivos), explica que desde el 2007 están trabajando en 13 comunidades de la Reserva Ecológica Manglares Cayapas-Mataje, en la provincia de Esmeraldas.
Su labor con los recolectores se ha enfocado en fortalecer su organización y en evitar que se extraigan conchas de un tamaño menor a 4,5 centímetros. Si estos animales no cumplen estas medidas, significa que no han llegado a su adultez, no han podido reproducirse y se pone en peligro su población a causa de la sobreexplotación.
Tras este trabajo, se dieron cuenta que también era necesario llegar con el mensaje al final de la cadena, es decir, a los restaurantes y a los consumidores. Para enfocar la campaña, realizaron 450 encuestas en los exteriores de los locales donde se consume este producto.
En Quito, el 84% de los encuestados conocía que la concha es un animal, mientras que en Guayaquil, el 95% respondieron que este producto no es ni animal ni vegetal. El 96% de las personas dijo desconocer cómo se reproduce la concha.
El resultado que motivó a los encuestadores fue que el 89% de las personas respondió que dejaría de consumir concha negra, una vez que se enteraron de la problemática. La campaña se enfocó en difundir la importancia del manglar, el trabajo de los concheros y la preservación de este producto.
Alvarado cuenta que 147 locales de comida se comprometieron con la campaña y allí se distribuyó material informativo como individuales con mensajes de conservación y sellos de compromiso que mostraba que estos restaurantes están adheridos a la campaña.
Ceviches de la Rumiñahui fue una de las cadenas que lideró la campaña a través de una alianza con Hivos. Marcelo Castro, gerente del Grupo de Los Ceviches de la Rumiñahui, explica que desde hace algún tiempo en sus locales ya se implementó un sistema para motivar a los distribuidores a no entregar conchas pequeñas.
Según Castro, crearon una escala de precios de acuerdo al tamaño. Al principio pagan un precio bajo por las conchas pequeñas y poco a poco lograron que los proveedores ya no les ofrezcan animales de tamaño menor a 4,5 centímetros.
Castro motiva a otros restaurantes a imitar esta práctica, ya que además de respetar la ley, las conchas grandes dan un mayor beneficio económico.