Con emisiones de CO2 estables, el 2016 podría batir récord de calor

Las temperaturas registradas entre enero y septiembre de este 2016 fueron 0,88 grados centígrados más elevadas que las medidas entre 1961 y 1990.

Las temperaturas registradas entre enero y septiembre de este 2016 fueron 0,88 grados centígrados más elevadas que las medidas entre 1961 y 1990.

Las temperaturas registradas entre enero y septiembre de este 2016 fueron 0,88 grados centígrados más elevadas que las medidas entre 1961 y 1990. Foto referencial: Wikicommons

El año 2016 será posiblemente el más cálido desde que se empezaron a medir las temperaturas, mientras que las emisiones de CO2 se mantuvieron estables por tercer año consecutivo en el planeta pese al crecimiento económico, según informes presentados este lunes 14 de noviembre de 2016 en la cumbre del clima en Marrakech.

De acuerdo con la Organización Meteorológica Mundial (OMM), en lo que va de año las temperaturas globales se situaron cerca de 1,2 grados centígrados por encima del nivel de la época preindustrial, con lo que probablemente se batirá el récord registrado en 2015, afirmó la OMM.

Las temperaturas registradas entre enero y septiembre de este 2016 fueron 0,88 grados centígrados más elevadas que las medidas entre 1961 y 1990. A principos de año, la temperatura subió sobre todo por efecto del fenómeno meteorológico El Niño.

La semana pasada, la OMM ya declaró el periodo transcurrrido entre 2011 y 2015 como el más caluroso desde el inicio de las mediciones. La organización dependiente de la ONU registra la meteorología a nivel mundial desde los años 50 del siglo pasado, mientras que otro organismo anterior comenzó a hacerlo en 1873.

También otros síntomas a largo plazo del calentamiento global están rompiendo récords, apuntó la OMM. Es el caso de la concentración de gases de efecto invernadero en la atmósfera, actualmente en niveles nunca antes registrados.

Además, la capa de hielo del mar en el Ártico fue menos amplia y en Groenlandia se derritió antes y en mayor medida. El Niño elevó las temperaturas de los océanos, lo que intensificó los daños en los arrecifes de coral e hizo que el nivel de los mares subiese más de lo habitual.

Según la OMM, en las regiones árticas de Rusia las temperaturas se situaron entre 6 y 7 grados centígrados por encima de la media a largo plazo. "Antes medíamos las temperaturas récord en fracciones de grado", advirtió el secretario general del organismo, Petteri Taalas.

"Debido al cambio climático, ha aumentado la incidencia y los efectos de los fenómenos extremos. Las inundaciones y las olas de calor que solo sucedían una vez en una generación son cada vez más frecuentes", añadió Taalas.

En tanto, las emisiones de CO2 se mantuvieron estables por tercer año, lo que podría marcar un cambio de tendencia a nivel global respecto de la década anterior a 2013, en la que las emisiones procedentes de los combustibles fósiles aumentaron un 2,3% anual.

El análisis realizado por la Universidad de East Anglia (Reino Unido) y el grupo Global Carbon Project sin embargo subrayó que aún no es momento de celebrar, pues hay que esperar a ver si en efecto la tendencia se mantiene.

El año pasado las emisiones de dióxido de carbono (CO2) se mantuvieron estables, de acuerdo con el estudio, publicado en la revista especializada Earth System Science Data. En 2014 habían aumentado en un 0,7% y para este año los científicos calculan que lo harán un 0,2%.

Según los autores, en los últimos tres años se emitieron en promedio unos 36 400 millones de toneladas de CO2. La estabilización se debe fundamentalmente a un menor consumo de carbón en China, que con un 29% es el país que más CO2 expulsa a la atmósfera.

En China las emisiones se cayeron en 2015 un 0,7%, tras incrementarse a lo largo de toda una década en más de un cinco por ciento anual. También bajaron las emisiones de CO2 en Estados Unidos, el segundo país que más contamina con un 15% del total, mientras que subieron el petróleo y el gas.

En 2015 las emisiones de gases de efecto invernadero cayeron un 2,6 por ciento. Por su parte, la Unión Europea (UE), el tercer mayor emisor de CO2 con un 10%, tuvo un aumento de emisiones de un 1,4% pese a que en la última década había sido la región que más esfuerzos había hecho.

India, que ocupa el cuarto puesto, emitió un 5,1% más de CO2, un crecimiento un poco menor al que tuvo en la década pasada. Como el Gobierno ha prometido duplicar la producción de carbón nacional, los científicos creen que esta tendencia se mantendrá.

Sin embargo, pese a que los datos son positivos, estos esfuerzos no bastan para limitar el aumento de la temperatura global a menos de dos grados centígrados, tal como han fijado los expertos en el Acuerdo de París.

Además, en 2015 se registró en la atmósfera más CO2 que nunca, probablemente porque los mares y las plantas, que lo absorben naturalmente, lo hicieron en menor medida por el fenómeno de El Niño, que provoca calor y sequía.

Asimismo, en el marco de la cumbre, el Banco Mundial (BM) presentó un informe que apunta a que los desastres naturales en todo el mundo provocan que unas 26 millones de personas caigan cada año en la pobreza.

De acuerdo con el reporte, las consecuencias económicas debido a las catástrofes equivalen a una pérdida de consumo de USD 520 000 millones por año. Los efectos de los fenómenos meteorológicos extremos son, por lo tanto, hasta un 60% más graves para la prosperidad de un país de lo que se estima, según los autores.

"Las tormentas, inundaciones y sequías tienen consecuencias humanas y económicas terribles. Y los pobres son los que pagan el precio más alto", dijo el presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim.

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