Más de 1 500 millones de personas en el mundo, en su mayoría pequeños agricultores de zonas rurales, subsisten en tierras que se están degradando. Esto como consecuencia del Cambio Climático y las malas prácticas agrícolas.
Por eso, el secretario General de las Naciones Unidas, Ban Ki-moon, hizo un llamado para administrar la tierra de forma más sostenible. El pedido se hizo en el marco del Día Mundial de Lucha contra la Desertificación y la Sequía, que se recuerda este 17 de junio.
“Más de 2.000 millones de hectáreas de tierra pueden ser recuperadas y rehabilitadas. Necesitamos estimular la adopción de medidas que conduzcan a la recuperación de esas zonas”, comentó Ban Ki-moon en un comunicado público.
Comunidades a lo largo del planeta han demostrado que sí es posible impulsar iniciativas para rescatar la tierra. En comunidades e Burkina Faso, el Níger y Malí, por ejemplo, se han recuperado más de 5 millones de hectáreas de tierras degradadas.
Si no se toman acciones, habrá cada vez menos tierra para producir alimentos. Según la ONU 12 millones de hectáreas de tierra de cultivos se pierden cada año por la desertificación, provocando pérdidas de la productividad agrícola de USD 42 000 millones anuales.
África es el más afectado y le sigue América Latina y el Caribe, que tienen una cuarta parte de tierras desérticas y áridas que totalizan cinco millones de km2.