La denuncia había sido retirada y las autoridades los dejaron en libertad. Pero en la reapertura del caso, la Fiscalía Tercera Especializada en Violencia de Género de Durán (Guayas) pidió la detención de los tres implicados en la supuesta oferta de servicios sexuales de un menor de 20 meses de edad por medios electrónicos.
Una alfombra gastada y gris lleva a la recepción. Detrás de una especie de jaula de metal y vidrio se distingue a un hombre. “No hay (habitación) disponible”, dice. Y recomienda buscar en un hostal al frente, en uno que funciona en el Centro de Quito. Allí existen cuatro hoteles que ahora son utilizados por trabajadoras sexuales.