REGALOS CHATARRA (I)
Eduardo Almendáriz G.
A propósito de los regalos de los aviones que Chávez nos hace, esta mañana se me prendió el foco: tengo la respuesta y quiero compartirla.
Hay regalos y regalos, algunos nos llenan de alegría, unos útiles y serviciales y otros inútiles o a destiempo, como una peinilla a un calvo o el texto de la Constitución a un aprendiz de dictador.
Pero regalo es regalo y hay que recibirlo. Ahora, el uso que de él se haga ya es cuestión de quien lo recibe: con el rearme y los “vientos de guerra” que soplan se me ocurrió que con el plan de chatarrización bien podríamos hacer eso, chatarrizarlo y reciclarlo para hacer fusiles y armamento.
Si de pronto quedan unos dos aviones, pueden servir para adornar el parque de La Carolina y los niños jueguen a la guerra. ¿No es buena idea?