Los estudiantes de los siete centros educativos que se ubican en el casco urbano de Pelileo, en Tungurahua, no acudieron a clases ni el lunes ni ayer. Un problema en la planta de tratamiento de agua del cantón obligó a la suspensión de las actividades pedagógicas.
Manuel Caizabanda, alcalde de Pelileo, explicó que en la madrugada del sábado hubo explosiones volcánicas muy fuertes, que generaron derrumbes en la parte alta del río Pachanlica.
Los inconvenientes se presentaron en la planta de abastecimiento de agua potable. Al parecer, el proceso eruptivo del Tungurahua provocó movimientos telúricos que generaron la caída de al menos cinco árboles de eucalipto en las captaciones que abastecen de agua a la ciudad.
En consecuencia se produjo la rotura de dos tuberías de la planta ubicada en el río Pachanlica, en el sector del Jum Jum (vía Pelileo-Quero).
“Acudimos personalmente a verificar los daños y desde el sábado se trabaja en la reparación de los conductores de agua. Pero hasta que se llenen los tanques reservorios habrá un déficit de agua”, añadió Caizabanda.
Debido al problema, el Comité de Operaciones de Emergencia de Pelileo decidió suspender las actividades escolares. De esa manera se busca precautelar la salud de los estudiantes y prevenir cualquier inconveniente, además estos días los planteles aprovecharán para hacer mingas de limpieza de la ceniza volcánica.
La planta abastece con 33 litros de agua por segundo al sistema de distribución del líquido, que son usados en Pelileo y varias parroquias aledañas. El agua se toma en el sector de Llimpe Grande, ubicado en Quero.
Está previsto que las clases se reanuden este día.