20 planetas musicales de Santiago Cruz se alinearon sobre Quito

santiago cruz

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Cuatro días después de que la Academia Latina de la Grabación revelara la lista de nominados a la décimo octava entrega de los Premios Grammy, el artista colombiano celebraba una nueva nominación junto con el público quiteño. Cruz fue postulado en la categoría Mejor álbum cantautor por ‘Trenes, aviones y viajes interplanetarios’, su cuarta producción discográfica consecutiva en recibir nominaciones.

El lanzamiento de este disco también motivó una nueva gira internacional, que este sábado 30 de septiembre llegó al escenario del Teatro Nacional de la Casa de la Cultura, con el nombre de Tour Interplanetario.

Un fragmento del poema sinfónico Así habló Zaratustra, que además es parte de la banda sonora de la película ‘2001: odisea al espacio’, sirvió como introducción al recorrido guiado por el cantautor colombiano y su orquesta, quienes dieron inició al show con Regreso. Tema de su nuevo álbum dedicado a su natal Ibagué, municipio del centro occidente colombiano cuyos paisajes transitaban en la pantalla fragmentada, al fondo del escenario.

“Si se animan a cantar con nosotros, seguramente la noche será memorable como es nuestra intención”, decía el músico invitando al público presente a participar del viaje musical que siguió con ‘Cuando regreses’. “Aquí en Quito es fácil cantar el pedazo que dice: y te falte el aire cuando yo te mire. Se sienten los metros de altura”, comentó el artista haciendo notar una ligera fatiga, que, sin embargo, no restó la potencia de su voz.

Luego haría una parada en Al otro lado de la puerta, que le dedicó a sus miedos y con la que animó al público a enfrentar los suyos con un ritual que consistió en levantar el puño, durante un tramo de la canción. “El miedo puede ser nuestro mejor aliado muchas de las veces. Si yo cayera presa del miedo no saliera al escenario. Pero, así como esos cinco minutos allá, antes de vernos, es un infierno, una vez que pongo un pie aquí arriba y los veo esto se transforma en un cielo”.

Santiago Cruz seguía compartiendo anécdotas e intercambiando palabras con el público que iba dejando el recelo para empezar a corear temas como Vida de mis vidas, No te necesito, Baja la guardia, entre otros.

También se tomó un momento para rendirle un homenaje a las personas que han sido víctimas de las más recientes catástrofes naturales, como los terremotos y huracanes que han afectado a Ecuador, México, Chile y varías islas del Caribe y la zona costera del Atlántico. “Ante esas tragedias es bueno valorar el aquí y el ahora, que estamos vivos, que estamos acá, que cantamos y sentimos y que le damos un beso pronto a la gente que queremos”.

Cada canción era interpretada entre imágenes reales y animaciones, que subrayaban el sentido de los versos llenos de figuras poéticas, así como de situaciones cotidianas, algunas relacionadas a la pérdida, la distancia, la soledad y otras a la fiesta, la vida, el reencuentro y el amor.

El momento más emotivo de la noche, fue cuando Santiago Cruz llamó al escenario a un invitado especial. El cantante ecuatoriano Daniel Beta se unió a su colega colombiano para interpretar a dúo Café con abrazo. La sorpresa se extendió cuando el colombiano, le ofreció su guitarra a la que llama Jackie Brown, para pedirle a Daniel Beta que interprete el tema No me pidas más tiempo.

El viaje interplanetario iba llegando a su fin con temas como La memoria de los sentimientos, Desde lejos y Como si nada, esta última, la favorita del nuevo disco. Pero aún quedó tiempo para expresar su solidaridad con “el amigo, marido o novio que viene obligado al concierto” y dedicarle el tema Un día de mierda.

Cruz se despidió de Quito con No nos digamos mentiras, la última de las 20 estaciones musicales interplanetarias recorridas en una noche de romance, anécdotas y sorpresas.

Luego de la gala de los premios Grammy Latino, que se realizará el próximo 16 de noviembre en el MGM Grand Garden Arena, en Las Vegas, el artista tiene previsto regresar al país para ofrecer un concierto en Guayaquil, en enero.

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