La BT-50 de segunda generación constituye una importante evolución respecto del modelo al que reemplaza. Sus líneas estilizadas, sus mayores dimensiones y su profunda revisión de la parte mecánica hacen de ella una camioneta con características premium.
Pese a los años que lleva en el mercado automotor nacional, la representante de Mazda en el segmento de camionetas sigue tan campante como cuando llegó para reemplazar a la Serie B de la marca japonesa.
El modelo es ensamblado por Corporación Maresa en su planta de Quito
Por su calidad, diseño y potencia, la Mazda BT-50 se ha convertido en el ícono del trabajo fuerte en el país desde hace varios años.