La venta de automóviles precisaba innovación y creatividad. La competencia exige nuevos métodos de comercialización, nuevas estructuras, nuevos atractivos. Lo que diseñó Autobahn Motors en Singapur responde a estas demandas. Creó "la mayor máquina de vender coches de lujo del mundo": un edificio que entrega vehículo como si fuese una máquina expendedora.
Un concesionario en Singapur almacena y recoge vehículos de alta gama como si fueran gaseosas o snacks. En el edificio se venden 60 modelos de Ferrari, Porsche o Lamborghini, distribuidos en quince plantas y cuatro columnas. Una obra de ingeniería automotriz impactante. Video: Infobae