La organización católica Ayuda a la Iglesia Necesitada (AIN) denunció este martes (15 de noviembre de 2016) un nuevo deterioro de la libertad religiosa en el mundo entre 2014 y 2016, sobre todo en 38 países, donde registró “persecuciones” o “discriminaciones” graves.
La canciller de Alemania, Angela Merkel, defendió el 14 de septiembre el pleno derecho a la libertad religiosa, incluido el uso del burka, aunque destacó la necesidad de restringirla en ciertos ámbitos de la vida pública donde se requiera ir con el rostro descubierto, como por ejemplo ante la Justicia.
Una ley sobre libertad religiosa en el estado estadounidense de Indiana (norte), que podría según sus detractores permitir a las empresas rechazar a clientes homosexuales en nombre de sus creencias, provocó la cólera de asociaciones de defensa de homosexuales.