No me ha sorprendido para nada el resultado de las elecciones, y a la gran mayoría de ecuatorianos tampoco; ya que el candidato que ganó tenía todo a su disposición: helicóptero, carros policiales, 40 soldados que cuidaban su seguridad, canales de TV, emisora de radio, prensa escrita y además todas las autoridades relacionadas con el sufragio “simpatizaban” con él; de manera que como dicen los chicos “así quien no gana”. Lo que sí me ha sorprendido es que candidatos con trayectoria política se hayan quedado con una votación sumamente baja; hay también un eterno candidato que como es su costumbre, perdió; y creo que debería dedicarse exclusivamente a sus negocios. Lo único grato de estas elecciones es el triunfo, porque yo lo considero así de un hombre joven y preparado, nuevo en la política y que, sin embargo, quedó en cuarto lugar; lo felicito y le digo que siga adelante, el tiempo pasa muy rápido y nos encontraremos ante nuevas elecciones presidenciales y le aseguro que usted será el triunfador. Por lo demás, nada nuevo, sucedió lo que esperábamos.