El resultado de los recientes comicios presidenciales en Uruguay refleja una realidad: Todas (¿o casi todas?) las tendencias de izquierda en América Latina (AL) han hallado fórmulas (cada una distinta de otra) para estirar al máximo posible su permanencia en el poder.
La asambleísta por Pachakutik, Lourdes Tibán, envió una carta a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) alertando la posibilidad de que desde el interior del Consejo Nacional Electoral (CNE) se intente dar un “golpe electoral”. Así lo informó esta mañana durante una entrevista en el canal Ecuavisa. Para Tiban, el Consejo es el único responsable de determinar, con el sistema “que aparentemente era cien por ciento seguro”, si las firmas eran falsificadas y retirarlas a su debido tiempo. “Resulta que se esperó que el presidente Rafael Correa, asustado porque ya no tiene el 70% de popularidad, ponga la denuncia” añadió. “El ojo esta puesto en el Pachakutik porque en las firmas de Alianza País está el 1 500 000 de beneficiados por el bono de solidaridad”. La asambleísta informó que en la carta que pretende enviar al CIDH lo que se le está diciendo es que “ponga el ojo en lo que va a pasar en el próximo proceso electoral” y de cómo comienza el ‘fraude’. Dijo no tener confianza