El amorfino, versos en forma de canción y composición poética corta, cuyo contenido mezcla lo romántico con lo humorístico, son algunas de las representaciones del pueblo montuvio. Su identidad también se destaca por su liviana vestimenta, su folclor y variada gastronomía.
La forma en que la cultura montuvia se apropió de las polcas europeas, imprimiéndoles unas aceleraciones al ritmo original, bailándolas con saltos y zapateo, se representó en una gala-conferencia de la escuela de danza Mada Cultura de Guayaquil, que abordó el tema del folclore costeño y las danzas introducidas.