La ingente labor, que se ha impuesto como misión democrática César Montúfar, está cosechando sus frutos. Con la Concertación llegó la hora del pacto entre los ciudadanos que anhelan volver al Estado de Derecho y la división de sus funciones. Que las instituciones retornen a su justo cauce para que sirvan a un Ecuador con plenas libertades.
Casi al final de la singular sesión del 10 de agosto, el Jefe –quien había dedicado 42 minutos a la prensa- dijo una frase que pasó casi desapercibida. Formuló una invitación a concertar entre el Gobierno, los empresarios y los trabajadores. Si mal no recordamos mencionó la conveniencia de "unidad en favor del país".
En reiteradas ocasiones el vicepresidente de la República, Lenín Moreno, ha llamado al diálogo y a la concertación. Por venir de nada menos que la segunda autoridad del país este pedido debería ser valorado y, sobre todo, atendido por los miembros del Estado y por la sociedad civil ecuatoriana.