La Compañía Nacional de Danza del Ecuador (CNDE) estrenó ‘Colina abajo’, que explora la acción de la caída como un símbolo y un enigma.
La Compañía Nacional de Danza del Ecuador (CNDE) cumple 45 años de vida institucional en medio de una pandemia, que la directiva y los elencos han tomado como una oportunidad para innovar las formas de pensar, producir y mostrar el trabajo artístico.
En ‘Línea y contorno de un abismo’, la literatura y la danza habitan en un mismo espacio. Esta coexistencia es posible a través de la presencia, a ratos onírica, de los personajes que pueblan la obra literaria de Pablo Palacio. Personajes interpretados por los bailarines del elenco de la Compañía Nacional de Danza del Ecuador.
Cinco hombres persiguen a una mujer. Ella corre para escapar, pero no lo logra. Los hombres la acorralan y comienzan a manosear su cuerpo. La mujer insiste en su lucha por huir pero ellos, embriagados de lujuria, no la dejan en paz. Mientras cada uno de estos hombres la ultraja, la gente apostada en las cercanías mira para otro lado, como si no pasara nada, como si lo que estuviera sucediendo a sus espaldas fuera algo normal.
Iñaki Azpillaga pasó alrededor de cinco semanas agitadas en Quito. Cuando no estaba en la Compañía Nacional de Danza, trabajando con el elenco en la obra ‘Miedo a volar’, estaba en su departamento temporal de Guápulo, asomado al ventanal con vista al valle de Tumbaco observando, pensando, imaginando. No es descabellado aventurar que la ‘pareja’, esa entidad bicéfala que ha trabajado tanto en su obra, ocupara algunos de sus pensamientos en esos momentos de contemplación.
Este año, la Compañía Nacional de Danza del Ecuador (CNDE) se propuso explorar el cuerpo desde diferentes enfoques; entablar diálogos con otras disciplinas artísticas y brindar un espacio para que los coreógrafos ecuatorianos y jóvenes presenten sus nuevas propuestas culturales.
Con la presentación de ‘Insania’, de Camila Enríquez; ‘Brecha’, de Vilmedis Cobas; ‘Inasible’, de Luis Cifuentes y las ‘Treffen y las remanencias del ser’, de Gabriela Rosero, ayer 28 de enero del 2016, en el Teatro México se iniciaron de manera oficial los festejos por los 40 años de existencia de la Compañía Nacional de Danza (CNDE).
El maestro Jorge Alcolea lleva más de 10 años en la Compañía Nacional de Danza del Ecuador. Actualmente es el director encargado de la entidad tras la renuncia de la maestra María Luisa González como directora. Alcolea considera que este momento de transición, al igual que todo cambio, asusta, pero es bueno.
La Compañía Nacional de Danza prepara la obra 'Huairapamushca', una propuesta escénica del coreógrafo ecuatoriano Freddy López en memoria del maestro Oswaldo Guayasamín. Fotos: Eduardo Terán/ El Comercio
Un tren avanza sin paradas pero fuera de las rieles ocurren situaciones de miedo, soledad y confusión. Los bailarines se persiguen entre sí, una pareja discute en su habitación y una mosca molesta a un hombre.