Enero es definitivamente el mes de la organización. El clóset es el espacio del hogar perfecto para empezar, pues es un lugar íntimo al que se acude varias veces al día.
El armario constituye gran parte del estilo y la decoración del dormitorio. Por esta razón, la organización en él es fundamental, ya sea que se cuente con un clóset normal o, aún más, en el caso de que se tenga ‘walking closet’.
No tener nada qué ponerse no es sinónimo de falta de prendas. Es el síntoma de un armario lleno de cosas viejas, de la talla incorrecta, del estilo equivocado o, definitivamente, de cosas que no gustan.
Buscar, probar, descartar una y otra vez. La conducta se repite todos los días, y para algunas puede convertirse en una odisea. Un estudio arrojó cuántos minutos le toma a una mujer vestirse.
No solo para la organización de la ropa están hechos los clósets en la actualidad. El diseño actual dispone espacios para diferentes implementos y actividades personales, necesarias antes de salir de la casa.
Entre los espacios fundamentales para la organización del hogar están los clósets. Estos equipamientos para las prendas, además de optimizar el espacio para el almacenamiento, son parte de la decoración.
Los dormitorios se optimizan proporcionando funcionalidad y orden a lugares reducidos. Para lograr eso, los clósets o armarios empotrados son la solución más socorrida y de mayor desarrollo tecnológico.
Los cuartos máster son los indicados para tener un vestidor o 'walking closet'; aunque los dormitorios individuales también incorporan este equipamiento.