Barcelona SC apelará sanción de la FEF contra su médico

Michael Arroyo es sacado en una camilla, el 14 de octubre pasado. Lo acompaña el médico (centro) Gustavo Peralta. Foto: API para EL COMERCIO

Michael Arroyo es sacado en una camilla, el 14 de octubre pasado. Lo acompaña el médico (centro) Gustavo Peralta. Foto: API para EL COMERCIO

Michael Arroyo es sacado en una camilla, el 14 de octubre pasado. Lo acompaña el médico (centro) Gustavo Peralta. Foto: API para EL COMERCIO

La Comisión Disciplinaria de la Federación Ecuatoriana de Fútbol (FEF) reveló, a través de su directivo Tulio Valdivieso, que el médico Gustavo Peralta, de Barcelona, prescribió el diurético al futbolista Michael Arroyo.

Por ese motivo, el galeno fue sancionado cuatro años por parte de la FEF, debido a su supuesta responsabilidad en el dopaje positivo de Arroyo.

Para llegar a esa conclusión, la Comisión Disciplinaria se basó en el informe que envió el Instituto de Medicina Deportiva de La Habana, en Cuba, donde se realizan los exámenes de dopaje para el campeonato ecuatoriano, y que detectó rastros del diurético hidroclorotiazida en la muestra de orina del deportista.

Valdiviezo, de la Comisión Disciplinaria, dijo que Peralta sería el responsable por la presencia del diurético en la muestra de orina de Arroyo. “Él fue quien la prescribió”, dijo el directivo en conversación telefónica con este Diario.

Antes del inicio de los partidos del campeonato, los médicos deben entregar al oficial antidopaje de la FEF un listado donde consten -con justificación- los medicamentos suministrados a los jugadores, Peralta habría omitido el uso de hidroclorotiazida, según Valdiviezo.

“No estaba en el informe”, contestó el directivo cuando se le consultó sobre el documento que entregó el galeno antes del clásico del 14 de octubre, en el estadio Monumental.

Hasta la tarde del viernes, la directiva esperaba la notificación de la sanción por parte de la FEF, para iniciar el proceso de apelación. Peralta recibió la suspensión, basado en el artículo 20 numeral 3 del reglamento antidopaje de la FIFA.

Allí se establecen cuatro años de sanción para las personas que suministraran al deportista sustancias consideradas prohibidas, que constan en el listado que publica anualmente la Agencia Mundial Antidopaje (WADA).

¿Qué es la hidroclorotiazida? Esa sustancia consta en la sección S5, y la WADA la cataloga como un “enmascarante”, con el que se puede ocultar el uso de anabólicos, hormonas y drogas sociales. La versión de Peralta es que Arroyo la usó para el tratamiento de cálculos renales. El deportista, por su parte, quedó impedido de jugar durante un año.

“El jugador tuvo un evento de cálculos renales una semana antes del Clásico del Astillero (14 de octubre), que fue tratado con hidroclorotiazida y quetorolaco. El informe del laboratorio no habla de cantidades de concentración de la sustancia, pero estoy seguro que solo son restos, porque esta es de absorción rápida”, dijo.

Pese a eso, según los reportes del club -publicados en su página web y en Twitter- antes del clásico, el único en duda para medir a Emelec era Damián Díaz, debido a un esguince en su rodilla derecha. Arroyo sí se entrenó esa semana.

A decir del médico, los diuréticos no potencializan al deportista, por el contrario lo deshidratan. “Jamás le daría un diurético a un atleta antes de una competencia”, dijo.

Según contó Peralta, los problemas renales de Arroyo constan en la ficha médica que se realizó al jugador en junio pasado, cuando se sumó a la plantilla. Sin embargo, evitó precisar si el deportista usó –además del diurético– otros métodos, como la disolución de los cálculos mediante láser.

Peralta ingresó a Barcelona en enero del 2016, precedido de su trabajo como jefe médico en las Academias Alfaro Moreno y gracias al prestigio del Instituto de Medicina Deportiva y Ortopedia (IMDO), que dirige. Ese mismo año culminó dos posgrados, uno en cirugía general y otro en traumatología.

El tema de Arroyo significó la apertura de dos expedientes de investigación en contra del galeno por parte de la Comisión Disciplinaria de la FEF.

El primero fue por supuesta obstrucción al proceso de toma de muestra, que luego quedó archivado porque la comitiva no encontró elementos para sancionar; y el segundo por suministrar el diurético, que derivó en la suspensión.

Peralta lucía acongojado durante la última rueda de prensa, en la que explicó su accionar y procedimientos con el deportista de 30 años. El galeno, que no aceptó preguntas, reconoció que esta sanción perjudica su trayectoria como médico deportólogo.

Estuvo ausente en el partido de Barcelona ante Deportivo Cuenca, el miércoles pasado, y tampoco estará en la banca de suplentes hoy, cuando los canarios se midan a Técnico Universitario.

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