Un ambiente de desazón e incertidumbre colma el sector exportador a la espera de que los congresistas demócratas y republicanos lleguen a un consenso y resuelvan en esta semana la extensión de la Ley de Preferencias Arancelarias Andinas (Atpdea).
Esta normativa permitió la entrada de cerca del 70% de las exportaciones del Ecuador a EE.UU. sin aranceles en el 2010, según la Embajada de ese país en Quito. Sin embargo, su vigencia expiró el fin de semana pasado.
En el país, la nueva línea de crédito de la Corporación Financiera Nacional (CFN) para que los exportadores puedan responder a los nuevos aranceles fue acogida con parcial satisfacción.
Durante la mañana de ayer fue poca la afluencia de exportadores a la matriz de la CFN en Quito y la mayoría de consultas respecto al préstamo se realizó por teléfono.
El titular de la entidad, Camilo Samán, indicó que aún no se tiene una primera evaluación de cuántas compañías aplicaron al crédito, pero destacó que hubo buenos comentarios de empresarios sobre la medida.
Recordó que el préstamo otorgado es por un monto máximo de USD 2 millones por empresa, la cual deberá demostrar que ha exportado durante un año a EE.UU., productos con la Atdpea.
Con los recursos, las compañías podrán pagar los nuevos aranceles hasta que el Congreso estadounidense amplíe las preferencias.
Samán explicó que para acceder al crédito no se requiere de garantías físicas ni prendarias. Solo hay que presentar información básica sobre el cumplimiento de obligaciones con el SRI y el IESS.
El presidente de Expoflores, Ignacio Pérez, señaló que esta línea de crédito no ayuda de manera directa al sector floricultor debido a que los costos de transporte y aranceles adicionales, en ausencia del Atpdea, son asumidos por los importadores en EE.UU..
Ello ocurre en un 95% de las fincas, dijo Pérez. Sin embargo, cree que la extensión de la Atpdea se dará porque tanto republicanos como demócratas tiene la intención de hacerlo, pese a que ahora tengan pugnas internas.
Las rosas y flores ecuatorianas pagan aranceles cercanas al 6% desde el domingo pasado en EE.UU. por la falta de la Atpdea.
La directora de Asociación Ecuatoriana de Industriales de la Madera, Johanna Arévalo, explicó que pese a ser positivo el crédito de la CFN, no ha generado gran expectativa, ya que no representa una solución de largo plazo, como el acuerdo comercial que han concretado Colombia y Perú.
La madera contrachapada paga un arancel del 8% en el mercado estadounidense, sin Atpdea, desde el fin de semana pasado.
Para el director de la Cámara de Comercio Ecuatoriano-Americana, Cristian Espinoza, la incertidumbre en torno a la ampliación de la Atpdea, se traduce en inseguridad respecto costo de los productos ecuatorianos para los importadores de EE.UU., quienes eventualmente podrían decidir cambiar de proveedores.
El Congreso estadounidense tiene hasta el viernes para tratar la ampliación de la Atpdea. Luego entrará en un receso de 11 días, tiempo en el que no se reunirá el plenario ni sus comisiones.
Por un lado, los representantes del Partido Republicano buscan la extensión de la Atpdea por cuatro meses, para que en ese plazo se apruebe el TLC con Colombia. En cambio, los demócratas pugnan por una extensión mayor.