Tras una discreta carrera como jugador y entrenador, Ahmad Ahmad tomó los riendas de la Federación de fútbol de Madagascar en 2003. Sorprendió desafiando a Issa Hayatou para la presidencia de la Confederación Africana de Fútbol (CAF) y este jueves consumó su particular hazaña: terminó con el reinado del camerunés, que parecía inamovible.