Cortesía Festival del Café
Talleres, catas y concursos caracterizaron al Festival del Café que tuvo lugar en Quito desde el 30 de septiembre al 7 de octubre. Una semana en la que Four Wourld Coffee y Café Velez congregaron a los aficionados para mostrar el café de especialidad que se da en el Ecuador.
Cortesía Festival del Café
“Creemos en este sector en Ecuador y para alcanzar un desarrollo sustentable hay que fomentar la cultura nacional y el mercado interno”, dice Gil Honegger, uno de los organizadores del festival. El evento nació por la necesidad de exhibir al público local las bondades del café como bebida y también como parte de un desarrollo productivo.
Para su primera edición, Honegger cuenta que las actividades se dividieron en tres categorías: los campeonatos, la academia y las actividades culturales. Los concursos se celebraron el primer fin de semana del evento y coronaron a cuatro ganadores en diferentes categorías. El Campeonato Nacional de Aeropress se lo llevó el argentino Alejo Kulinski, quien representará al Ecuador en el Campeonato Internacional de Aeropress. En esta competencia los baristas trabajan con un tubo cilíndrico que ayuda a extraer los aromas del café con la infusión del agua y la presión del aire que ejerce el barista; el equipo con que se trabaja se llama Aeropress.
En la categoría de arte latte ganó Johann Buenaño, un área en donde la presentación de la taza es lo que más cuenta. Los baristas trabajan con el café, la crema y la leche para crear diseños originales sobre las bebidas. Wilson Yánez, productor de café de la Amazonía, triunfó en la categoría de filtrado, un aspecto en que se buscaba dar a conocer el valor y sabor del grano de mano de los mismos productores.
Cortesía Festival del Café
En la competencia de cata se coronó a Leonardo Villagómez. Esta categoría se conoce como triangulaciones. Los catadores o sommeliers afinan su paladar para distinguir entre un grupo de tazas un café de cualidades distintas.
Buenaño, Yánez y Villagómez lograron también ingresar a la Expoespeciales de Bogotá, una de las ferias más grandes de Colombia dedicada a los cafés de especialidad, que se dará cita en el país vecino del 18 al 21 de octubre.
El ámbito académico, el festival contó con baristas internacionales como Mateo Beluffi y Giuseppe Musiu de Italia. Honegger explica que esta área estaba enfocada más para baristas o expertos en café que buscaban certificaciones, las cuales después de los cursos fueron concedidas por ConQuito. Beluffi dictó talleres de arte late y filtrados en Quito y Ambato.
Las actividades culturales abiertas al público se desarrollaron en diferentes cafeterías que se unieron al encuentro. Traviesa, Stratto, Isveglio, Rio Intag o Galetti pusieron a disposición del público actividades afines a sus líneas de café. Se dictaron talleres desde la semilla a la taza para mostrar la trazabilidad y fermentaciones al café, catas públicas, degustaciones de cafés con bebidas espirituosas, talleres sensoriales e incluso dibujo con café.
Honegger resalta que por día asistieron cerca de 300 personas a diversos eventos. Buscan posicionar el Festival del Café como un evento anual que congregue a la comunidad productora y consumidora para desarrollar el sector del café ecuatoriano, promocionar a la industria del café de especialidad y fomentar la cultura cafetera.