De Vido, la cara de la derrota

El hombre más poderoso de la era kirchnerista está preso. Julio De Vido acumuló poder a la sombra de Néstor Kirchner y lo extendió durante el mandato presidencial de su viuda.

El ex ministro de Planificación se entregó el miércoles, pocas horas después de ser desaforado y de la derrota electoral de Cristina Fernández de Kirchner a cargo del oficialista Cambiemos, que se hizo de las primeras minorías en ambas cámaras.

Una gran derrota de ‘los pibes, los soldados de Perón’, cuyos cánticos no se escucharon en el ‘velorio’ del domingo en la cancha de Arsenal de Sarandí.

La última marca patentada por el reciclado kirchnerismo fue la de Unidad Ciudadana. Atrás, con bancada fuerte en el Congreso ,donde se desaforó dos días después a De Vido, queda el Frente para la Victoria, que gobernó durante la década robada y que morirá como sus creadores o La Cámpora que tomó el nombre de un fiel militante peronista para esconder una juventud que reproducía vicios del pasado y consignas del proyecto nacional y popular (que, por ahora ya no es muy nacional que digamos y menos popular que antes). La debacle de Cristina supondrá el intento de la reconstitución de fuerzas de los dirigentes peronistas en distintas jurisdicciones donde alcanzaron bancas legislativas o donde conservan ese poder que antes parecía indestructible de un cono urbano perforado por la Alianza que consolidan Macri.

Perder elecciones en el Gran Buenos Aires, en el cinturón que circunda a la Ciudad Autónoma(antes, Capital Federal, donde siempre perdieron) ,y en toda la provincia donde dominaron el espectro, es un cambio sustancial. Allí dominó Perón por la vibrante fuerza popular que acumuló en sus mandatos y se agazapó durante su derrocamiento y exilio de los 50 del siglo pasado y volvió a aflorar en los 70 para el triunfo de Cámpora, su paso al costado y la victoria de Perón y su segunda esposa.

El peronismo, cuyo membrete oficial ahora conserva el de Justicialismo, navegó con la brújula del caudillo. Él mismo fue cercano a la jerarquía eclesiástica hasta que enojó y mandó a quemar iglesias, estuvo apoyado por grupos violentos, luego los llamó estúpidos e imberbes, en mayo de 1974 a Los Montoneros y rescató a la resistencia de los poderosos sindicatos.

El peronismo bajo la presidencia del incombustible senador reelecto Carlos Saúl Menem fue neoliberal, y con el matrimonio Kirchner coqueteó con el llamado socialismo del siglo XXI de Hugo Chávez.

Pero la huella de este período es la corrupción. Más de 200 causas se ventilan en la justicia. La ex presidenta llamada a declarar a tribunales. Julio De Vido el hombre más poderoso del kirchnerismo, en prisión, lo mismo que los ex secretarios López, Jaime, el ex ministro de Defensa Milani, por acusaciones relativas a derehos humanos, el contador de Kirchner, etc.

Pero aquí se condecoró a su viuda y la estatua de uno de los gobernantes más corruptos del continente sigue en pie.

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