¡Todavía se puede firmar la petición para que el Ecuador conceda asilo a Julián Assange! La página web es: https://www.justforeignpolicy.org/ y se demora menos de dos minutos llenarla. Pero, estimado lector, idealmente no la firme simplemente, compártala en Facebook, twitéela, hable acerca de ella a su esposa, esposo, a sus colegas e incluso a desconocidos en la calle. Es más, si usted está viendo este artículo on line, le ruego encarecidamente que se detenga, interrumpa la lectura y vaya a firmar.
Hágalo incluso por el hecho de saber que impulsa una acción en la que se ha involucrado “El intelectual, hoy, más importante del planeta”, que según el New York Times es Noam Chomsky. Pero no solamente él, Danny Glover, Oliver Stone, Michael Moore, y Bill Maher –el comediante intelectual norteamericano que ha revolucionado el rol del entretenimiento en la formación de la democracia– y muchos otros pesos pesados han sumado su firma.
Si el Ecuador no da el asilo político, existe una gran posibilidad de que se lo extradite a Suecia y luego que se lo extradite a los EE.UU., donde se lo enjuiciaría por la ley ‘Espionage Act’ que prevé la pena de muerte. Así, la persona que difundió el video de un helicóptero Apache americano asesinando deliberadamente civiles, que permitió que el mundo conozca la hipocresía y maquinaciones de la diplomacia estadounidense para menoscabar la democracia y afectar derechos humanos, ese hombre terminaría en una silla eléctrica, como un común asesino.
Cuando argumentan las personas que están en contra de la venida de Assange, se escucha: es un criminal de delitos sexuales que no merece tal beneficio. Hace unos días apareció en este diario un artículo de Grace Jaramillo titulado ‘Assange, Assange’, en donde asevera que es un hombre que piensa que está por encima de la ley y que “es la misma actitud que le llevó a abusar sexualmente de dos de sus colaboradoras en Suecia, quienes creían en su causa”.
Assange no ha sido condenado por delitos sexuales, de tal manera que por la presunción de inocencia no se pueden hacer declaraciones tan tajantes. Las autoridades suecas lo requieren meramente para un interrogatorio. Esta misma autora señaló que “la decisión debe tomarse en función de nuestro marco constitucional y de los instrumentos de DD.HH. que hemos firmado. Este caso tiene que ver más con derechos de la mujer…”.
Para que este caso implique esencialmente derechos de la mujer, mínimamente debería haber una condena firme en contra de Assange. Hasta que no se pruebe lo contrario, Assange es el hombre que nos permitió conocer mejor el mundo real. Gracias a sus acciones, la conciencia política de los individuos de todo el mundo es más aguda y menos desconfiada. Puede quedarse en mi casa si quiere.