La educación y la cultura de los pueblos indígenas debe ser vista en interrelación con el sistema económico del Ecuador y con los valores culturales e históricos de pueblos específicos. Los índices de industrialización, de avance tecnológico, de intercambio comercial, de la construcción, la agricultura y la comunicación, largamente retrasados, muestran que el gobierno del presidente Correa agudizó las contradicciones y malos manejos que influyen en el lento desarrollo actual del país, sobre todo el de los pueblos originarios, que son los más vulnerables. Se incluyen temas agravantes que afectan directamente a los pueblos originarios: el modelo extractivista, la pérdida de la soberanía alimentaria frente a la agroexportación, empobrecimiento de las tierras comunales, las escasas redes comunicacionales, el abandono del campo y la migración a las ciudades.
Además, pesa sobre la Educación Intercultural Bilingüe (EIB) algo que no existe ahora, ni ha existido en la historia del Ecuador: programas de Educación estatales que se basen en una verdadera democracia e igualdad de derechos, en una relación amistosa entre el Estado y sus pueblos ancestrales, en una política que contemple los intereses nacionales de cada una de las colectividades .
Sabemos que un tipo de Educación, relativamente nueva en Ecuador, como es la Educación Intercultural Bilingüe, plantea una diversidad de requerimientos que necesitan lograr avances significativos: conocimientos científicos sobre las lenguas y las culturas, métodos de enseñanza con currículos adecuados, valorización constante de programas, creación de materiales didácticos apropiados, posibilidades de investigación para los docentes, cuadros de asesoramiento pedagógico, consejos lingüísticos para la creación de neologismos, normalización y normatización de la escritura, preparación de docentes en cada lengua, entre otras cosas.
El 11 de diciembre anterior, llegó hasta el palacio de gobierno, luego marchar 13 días, una numerosa delegación de pueblos indígenas para exigir al presidente Moreno un diálogo con resultados sobre los asuntos que les compete Entre otros, los conflictos territoriales pendientes, la liberación de los presos políticos involucrados en manifestaciones de protesta y la restitución de la EIB como espacio de autonomía frente al Estado. Lenin Moreno recibió en el palacio a los dirigentes de los pueblos en protesta, y les ofreció velar por la integridad y sostenibilidad de sus territorios, además les prometió devolver el Sistema de EIB a sus verdaderos gestores y promotores, en un plazo de seis meses a contar desde la fecha del diálogo; asimismo prometió incrementar de manera sustancial la inversión en la EIB. Queda por verse la capacidad política e histórica de mandatario para resolver las justas exigencias indígenas.