y Carmen Arroyo
El Informe Mundial sobre Drogas 2018, de la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (ONUDD) subraya la importancia del género en el consumo de drogas y en el comportamiento, lo que hace necesario suministrar diferentes tipos de soluciones legales y médicas.
“No hay una estrategia única para hacer frente al uso de drogas, debe haber una variedad de medidas de prevención basadas en la evidencia, como reducción del daño, tratamiento y otros servicios de apoyo a la salud y social que puedan responder a muchos de los problemas que afrontan las mujeres que usan drogas”, explicó Marie Nougier, directora de investigación y comunicaciones en el Consorcio Internacional de Política de Drogas, en diálogo con IPS.
Alrededor de 5,6 por ciento de la población mundial entre 15 y 64 años, unas 275 millones de personas, consumieron drogas en 2016, señala el informe publicado en la última semana de junio. De esos, 31 millones sufren desórdenes, es decir que necesitan tratamiento, pero este solo llega a uno de cada seis consumidores.
Las consecuencias son terribles, 450.000 personas murieron en 2015 por el consumo de drogas. Además, la producción mundial de opio aumentó 65 por ciento de 2016 a 2017, la estimación más elevada hasta ahora.
El informe, dividido en cinco secciones, trata en la última, del impacto del género en el consumo de drogas, y en especial en las mujeres.
Las otras incluyen información como un resumen ejecutivo, demanda y suministro de drogas, mercados y el uso de drogas relacionado con la edad.
Las mujeres suelen consumir más seguido opioides y tranquilizantes que los hombres, pero usan más canabis y cocaina.
Las mujeres empiezan a consumir drogas después que los hombres, pero aumentan su ingesta de drogas relacionadas, alcohol, opioides y cocaína, más rápido que ellos.