En el libro The Nature of Prejudice –la Naturaleza del Prejuicio- el profesor de Harvard y figura universal de la Psicología, Gordon Allport -1897/1967-, definió al prejuicio como actitud suspicaz u hostil, ante colectivos o personas formulando tachas negativas, usualmente sin ánimo de verificarlas. Para el profesor Allport es un cuadro patológico.
Lo grave es cuando los prejuicios se manifiestan en quienes tienen espacios de poder, peor si éstos se constituyen en cuasi-absolutos, caso en el que los del entorno por pretender ser más fieros son más agresivos, o actúan por corrupción, convencidos que serán encubiertos por el poder, o simplemente son obedientes-miedosos, por defender algún nicho de función pública.
Las ideologías son caldo de cultivo para los prejuicios. Tiempo anterior fue el de los “anti-comunistas”. Su contra, los “anti-yanquis”. Este último es dominante en las áreas de influencia del llamado “socialismo siglo XXI”.
En este entorno conceptual podría explicarse la declaración del Presidente Correa a la periodista estadounidense nacionalizada venezolana Eva Golinger, de la cadena Russia Today (RT), cuando ante la pregunta de si era una broma su afirmación de que “Donald Trump era la mejor opción para presidente de Estados Unidos”, Correa contestó que para América Latina “mejor que gane Trump”, con el agregado “¿Cuándo llegaron los gobiernos progresistas al poder?, ¿con Obama? o ¿con Bush? Era tal el rechazo a las políticas elementales de Bush, que generó toda una reacción en América Latina. Lo mismo generaría Trump que exacerba las contradicciones”.
Verdad que de inmediato, puntualizó “por el bien de Estados Unidos y por mi aprecio personal hacia ella, quisiera que gane Hillary (Clinton)”.
El comportamiento y la agresividad del fundador de WikiLeaks, Julián Assange, protegido en la Embajada del Ecuador en Londres, contra la señora Clinton, como que coincidía con aquello.
Obtuvo Assange que el gobierno del Ecuador difiera un interrogatorio – fijado para el lunes 17 de octubre- trasladándolo al lunes 14 de noviembre, de modo que hasta la fecha de las elecciones en Estados Unidos, 8 de noviembre del 2016, esté vigente el asilo. Y sintiéndose protegido hizo amenaza pública, desde la Embajada del Ecuador, contra la señora Clinton, de publicación de material que la aniquile.
El lunes 17 de octubre WikiLeaks emitió un comunicado en que expresó “Podemos confirmar que Ecuador cortó el acceso a Internet a Julian Assange el sábado, a las 1700 GMT, poco después de la divulgación de los discursos (sic) de (Hillary) Clinton en Goldman Sachs”. La pregunta esencial es ¿el internet era un inalámbrico del propio Assange o era de la Embajada del Ecuador?.