El potencial minero del Ecuador despierta interés en la comunidad de empresas internacionales que quiere invertir. Se habla de cifras de USD 5 000 millones. Es indispensable para atraer esa inversión un marco de seguridad jurídica. La Constitución, en sus arts. 72 y 408, se refiere al tema sin desligarlo de la protección ambiental y del impacto social.
Las autoridades ecuatorianas, presentes en la Confe-rencia anual de la Asociación de Exploradores y Explo-tadores Mineros en Canadá, garantizaron una nueva época en la explotación minera y consideran un mito que no se quiera inversión privada en el país.
La minería puede efectuarse bajo el marco legal de la Constitución y la Ley de Minería, pero debe ser una actividad que genere empleo y sea cuidadosa con el impacto ambiental y los efectos sociales. Las licencias ambientales, el respeto a las zonas intangibles y el máximo cuidado en las áreas frágiles deben ser observados con rigor.
En el país hay cinco zonas geográficas prioritarias para la minería en Limo Catamayo en Loja-, en Zamora, en Macas, en Tena y en Cuenca. Los minerales de mayor potencial son el cobre, el oro, la plata y el zinc.
Ecuador posee reservas de uranio, mineral que se puede emplear en reactores generadores de energía, en actividades de aviación, usos satelitales y en el delicado tema de las armas nucleares. Hay susceptibilidades en la comunidad internacional sobre ciertas relaciones del Gobierno con países que se han declarado enemigos de Occidente.
La Agencia Internacional de Energía Atómica tiene estudios. Científicos de la Universidad Politécnica trabajan en el tema de extracción de uranio con el apoyo de orga-nismos internacionales.
El potencial minero, del mito a la realidad.