Mientras algunos detractores del “Imperio”, como llaman “cariñosamente” a Estados Unidos, advierten que es inminente el ocaso de su hegemonía, ese país decidió autoabastecerse de petróleo, para lo cual, mediante sofisticada tecnología, intensificó el año pasado la extracción de shale oil y gas oil de las enormes reservas existentes en la profunda capa de esquisto de su territorio, con el consiguiente derrumbe de los precios de los hidrocarburos a escala mundial.
El crudo tipo WTI, que sirve de referencia para el petróleo ecuatoriano, había llegado el 19 de junio de 2014 a su precio más alto del año: 115,71 dólares el barril, y el 19 de diciembre cayó al tope más bajo: 54,11. Se especula que podrían bajar más aún los precios, pero especialistas en la materia consideran que es poco probable por el alto costo de la extracción del nuevo tipo de combustible.
La situación económica y financiera se tornó crítica en los países cuyo presupuesto depende de la exportación petrolera, como es el caso de Venezuela, que ya soportaba desde antes una serie de problemas; los gobernantes rusos reconocieron que también atraviesan una grave situación. Agencias noticiosas de Brasil manifestaron a fines de diciembre que Petrobras se “descalabró”. Esto por citar pocos casos.
Ecuador vende la mayor parte de su petróleo a China. En fuentes oficiales se dio a conocer que en diciembre el precio fue de 54,4 dólares, además hay que considerar el interés que se reconoce al gigante asiático por el pago anticipado. En el presupuesto para el 2015 se fijó el promedio de 79,7 dólares por barril y cada dólar de disminución en el precio de venta del crudo tiene un impacto de 80 millones de dólares. En cambio, en los años anteriores el precio real superó al presupuestado, lo cual brindó cierta bonanza fiscal.
El Gobierno Nacional ha tomado ya varias medidas, entre ellas la expedición de la Ley de Incentivos a la Producción y Prevención del Fraude Fiscal, para contrarrestar la caída del precio del petróleo y otras dificultades fiscales.
Muchos analistas insisten que es indispensable que se adopte una política de drástica austeridad, que contemple, por ejemplo, la supresión de viajes innecesarios, el dispendio en propaganda excesiva de la obra pública (autobombo), etc.
Con cierta ironía se comenta que para comenzar el año y la economía rigurosa, en la nómina de acompañantes al Presidente en su viaje a China, donde, probablemente, se gestionarán nuevos créditos, sólo constan 12 ministros, la Presidenta y cuatro miembros de la Asamblea, los secretarios de Comunicación y del Agua, los directores de la Senescyt y de Seteci, el Gerente de Yachay, los alcaldes de El Carmen y de Morona, los presidentes del Movimiento Huancavilca y de la Organización Juvenil Latin King, cuya presencia en Pekín debe ser de mucho beneficio para nuestro país…