Nuevamente se conjuraron los votos de la mayoría oficialista con el apoyo de dos legisladores del PRE y de un ex socialcristiano para bloquear en la Comisión de Fiscalización de la Asamblea Nacional el trámite del juicio político al ministro del Interior, José Serrano.
El asambleísta César Montúfar, de Concertación Nacional Democrática (CND), había instaurado una causa en contra del titular de la Cartera del Interior por considerar que había una flagrante intervención en la justicia, al entrevistarse con jueces que llevaban causas de alto interés del Gobierno. Concretamente, Montúfar dijo que el ministro José Serrano habría amenazado a los jueces del Tribunal Quinto de Garantías Penales si no fallaban a favor de las tesis oficiales en el caso del coronel César Carrión, ex director del Hospital de la Policía, absuelto por los hechos del 30 de septiembre.
El presidente del Tribunal, Hugo Sierra, admitió que el ministro Serrano fue a su oficina y le dijo que había preocupación en el Gobierno porque otro tribunal había declarado inocente al mayor Fidel Araujo.
Los legisladores que hicieron mayoría no encontraron argumentos suficientes para avanzar en el juicio. El asambleísta Montúfar denunció la interferencia de funcionarios del Ministerio en diálogos con parlamentarios de Alianza País. El caso fue archivado.
Resulta inaudito que la Asamblea haya resignado una vez más uno de los principios básicos que sostienen la democracia: la facultad de fiscalizar. En un tejido legalista de dudosa legitimidad han urdido una trama para evitar que el Gobierno asuma su responsabilidad de rendir cuentas al foro político por excelencia, que es el Parlamento.
Ya son 13 juicios archivados.