La vigencia de la Comunidad Andina (CAN) se salvó por el momento. Tras la reunión de cuatro presidentes en Santa Fe de Bogotá, se propone una reingeniería. Para Ecuador, el tema del libre transporte terrestre es fundamental para su continuación.
En 1969 se constituyó el Acuerdo de Cartagena, más tarde conocido como el Pacto Andino (hoy, Comunidad Andina). Las ambiciosas metas comunes de los seis países que en principio se establecieron tuvieron un cumplimiento parcial, tímido se diría.
Los desmembramientos de Chile, primero, Perú, de forma temporal y de Venezuela en el último quinquenio por voluntad del presidente Hugo Chávez, fueron golpes políticos que la debilitaron frente al crecimiento de otros mecanismos de integración regional como el Mercosur.
La cita de Bogotá, para la óptica ecuatoriana, contenía un tema de agenda crucial. Que se haga realidad una vieja aspiración: la libertad del tránsito de transporte terrestre, permanentemente boicoteado por la fuerza de los operadores de transporte de cada país, lo cual dificulta el tránsito de mercaderías y eleva considerablemente el costo comercial intrarregional.
Para el Presidente colombiano, el liderazgo regional es tema fundamental en su agenda y el resultado de la cita luce prioritario. Los mandatarios de Perú y Bolivia consideran que hay que fortalecer el proceso regional. El presidente Correa, de su lado, anunció que Ecuador no se retirará de la CAN, cuyo estudio se anunció. Empero, el cumplimiento de los objetivos es una condición para el país.
Ecuador deberá afrontar las dificultades de comerciar sus productos con los países vecinos, Colombia y Perú, que ya tienen tratados de libre comercio con Estados Unidos y Europa que les son beneficiosos a ambas naciones.