Los impuestos están relacionados con el poder adquisitivo del contribuyente. Si una persona gana mucho dinero, se le aplica una tarifa alta de impuestos. Quien genera más riqueza comprará, luego de haber tributado, lo que sus dólares puedan pagar. Si un ciudadano no cumple con la cancelación de sus obligaciones impositivas puede deberse a dos causas: o que sus ingresos son tan reducidos que están por debajo del monto mínimo sujeto a pago; o que los evade.
No hay duda que quien paga impuestos le va bien, y por ello es sujeto pasivo de una obligación tributaria. El que no paga, por encontrarse debajo del monto mínimo sujeto a impuestos, debe llevar una vida austera, sin mayores lujos. Supone una situación económica estrecha, por tanto no es pelucón, lo que conlleva no ser aficionado a degustar lo que la señora Presidenta de la Asamblea Nacional sugiere comer a un grupo de ecuatorianos. ¡Extraña afición gastronómica ! En el primer semestre de este año, según análisis presentado por la Revista Gestión (número 231), el SRI ha recaudado más de seis mil millones de dólares, “lo que representó un crecimiento de 13,3% respecto al mismo período de 2012”. De esa cifra, los cien contribuyentes que mayor Impuesto a la Renta han causado, son empresas extranjeras domiciliadas en Ecuador antes del inicio de la Revolución Ciudadana, y compañías nacionales constituidas antes que la troupe que hoy gobierna se haya instalado en Carondelet.
Aquellos contribuyentes que cumplen a cabalidad con sus obligaciones para con el Fisco, pueden utilizar el dinero que les queda luego de pagar impuestos, en cualquier cosa, sea adquiriendo bienes muebles o inmuebles, o empleando sus recursos en obras sociales o en placeres mundanos, como en viajes, comidas, ropa de marca, etc. Estas personas han justificado sus ingresos y han observado la ley. Nadie los puede calificar de evasores. Además, muchos de estos gastos son deducibles de la base imponible del Impuesto a la Renta .
Lo que tiene un tufo al producto de sazón recomendado por la Presidenta de la Asamblea Nacional, es lo que se ha dicho respecto a un remate de bienes incautados por el SRI a un hombre millonario ecuatoriano: que los adjudicatarios de esos bienes es gente cuyos ingresos no les permite comprar vehículos de lujo, puesto que no han pagado valor alguno en concepto de Impuesto a la Renta. En cuyo caso se está frente a ciudadanos que no han aportado a la sociedad, ni al país en el que realizan sus actividades económicas. Solo se habrían beneficiado de su deseo de generar riqueza “para mi solito”, como lo dice una propaganda.
Si quienes no pagan impuestos pertenecen a la oposición, son delincuentes; pero si son cercanos al Gobierno, son errores sujetos a perdón y olvido.