Las figuras del 24 de Mayo

La figura del 24 de mayo del 2017 ingresó al escenario en una silla de ruedas, confirmando su título con su juramento como presidente del Ecuador (2017-2021), con su discurso de una hora 37 minutos y con las cosas que dijo. Lenin Moreno Garcés, de 64 años, asumió el mando y hay expectativa por lo que sucederá en su período. Ganó estrechamente la presidencia y se inquieta cada vez que le dicen que el tema económico es el gran reto y le suman las deudas.

Pero ya ha superado muchos obstáculos en su vida, entre ellos las consecuencias de un disparo artero en la columna. Uno de sus recursos fue el humor. Otro la canción. Es hábil dircurseador. Un día del año 2007 dio un buen paso cuando asumió la vicepresidencia en binomio con el presidente Correa, quien le puso la banda el miércoles.

Ya presidente y figura de la jornada, Moreno dejó en claro que su gobierno rinde culto a la dolarización y descarta la moneda paralela. Bien. Luego, tras prometer la lucha total contra la corrupción y el aporte al diálogo, reveló que no está de acuerdo con su antecesor en varios puntos.

Por ejemplo anunció una buena y fluida relación con la prensa y con los militares y dar información al público sobre el caso Odebrecht. Además, mantuvo una amplia reunión con los indígenas y antes había intercambiado ideas con los banqueros. No le parece bien un excesivo número de guardaespaldas ni la cantidad de vehículos oficiales. El gabinete es aceptable para unos y muy correísta para otros. Ayer ya no hubo sabatina. Es posible que Lenin se instale en el Palacio de Carondelet.

El ex presidente Correa fue figura durante diez años y varios meses y no se descarta que siga con esa aspiración. Desde el principio hasta el fin de su gobierno se mantuvo en acción permanente e igual fue el miércoles 24 de mayo. Las 543 sabatinas y los 134 viajes al exterior así como los 15 doctorados honoris causa están muy relacionados con su estilo y su perfil.

Fue varias veces reelecto y no hay duda de que tiene que ver con la elección de Moreno. Las relaciones entre los dos han aparecido buenas y no se sabe de discrepancias como las que se perfilaron en el discurso del nuevo presidente, aunque son razonables.

Uno de los temas pendientes es la actividad de Correa ahora que ya no tiene trabajo. Se ha dicho que en julio viajará a Bélgica, luego de que su hijo Miguelito termine este año escolar. No se descarta por cierto, un intento de reelección. Una buena parte de la Asamblea es correísta. Su actividad permanente y más de los últimos tiempos influyó en el desenlace del día, este famoso miércoles.

Finalmente, no llamó la atención a nadie que en vez de ir al almuerzo programado en el Palacio de Cristal vaya directamente al hospital Andrade Marín, con una neumonía felizmente leve pero con un cansancio grande. Después de 10 años de gobierno intensivo bien merece una semana de hospitalización.

Suplementos digitales