La pesada carga de la normativa tributaria

La Cámara de Industrias y Producción (CIP) presentó el estudio ‘La carga tributaria en el Ecuador’. Allí se menciona que las 25 reformas que se han aprobado entre el 2006 y el 2015 (y aún faltarían otras, si se cumple el anuncio del Ejecutivo de enviar el proyecto de Ley de Plusvalía antes de que termine este Gobierno), provocaron que la carga tributaria se incremente en siete puntos en ese período.

Con base en la metodología de la investigación se mencionan datos relevantes, como por ejemplo que en el 2014 unas 8 500 empresas fueron afectadas por pagos en exceso en su impuesto a la renta (IR) o que en el Ecuador se trabaja 82 días para el Estado.

A lo largo de estos años, una de las principales inquietudes empresariales ha sido la inestabilidad jurídica en materia tributaria. Eso ha determinado que dentro de su planificación haya sido una práctica constante la revisión de sus costos, la contratación de más personal para adecuarse a los cambios normativos y destinar más tiempo al cumplimiento de sus obligaciones con el Fisco.

En el período analizado se puede visualizar que la política tributaria del Régimen no ha variado. Las reformas se han aplicado tanto en época de bonanza como en época de contracción económica. Además, se ha evidenciado una gestión más agresiva para recaudar los tributos y combatir la evasión.

La inestabilidad tributaria ha sido una piedra en el zapato durante la última década, a tal punto que hasta el propio candidato a la Presidencia del movimiento oficial ofrece una tregua normativa, como parte de su oferta de campaña para llegar a Carondelet. El resto de candidatos también ven en el ámbito tributario una oportunidad para captar el voto de los sectores productivos.

A partir de la firma del acuerdo con la UE, el país tiene el desafío de mejorar su competitividad. De cara a sacar provecho con esta oportunidad es imperativo que la normativa tributaria se estabilice. El sector productivo debe pensar más en innovación y no destinar ese tiempo en cómo responder al Fisco.

Suplementos digitales