Para que nadie diga con razón, ‘tarde piache’, cada día tomo nota de los desatinos idiomáticos que encuentro en mis lecturas, aunque hoy hablemos menos que antes de corrección o incorrección: -¿es, esta resistencia a censurar, bendición o desgracia?; ¿dejadez, acierto o concesión?
Lo cierto es que, aunque tendamos a admitirlo todo en lo escrito: puntuación ilógica, ambigüedad, repetición por pura pobreza léxica; falta de propiedad al emplear palabras o giros cuyo significado no entendimos y tantas otras faltas adecuadas a la abrumadora pobreza comunicativa de que adolecemos, tales desatinos deben volverse visibles para ser justos con el milagro de nuestro idioma, el de 500 millones de habitantes de este deteriorado, hermoso planeta.
Entre los papeles que recorto en mis afanes, encontré la foto de un médico de los ‘de antes’, de los que no piensan en cuánto cobrarán, sino en cómo podrán curarnos: de media edad, gordito, amable y campechano, de sonrisa encantadora; respondía a su interlocutor, sobre el cáncer que causa la ingestión de carnes ‘procesadas’: “Si la naturaleza encontraría tan nociva la carne, nos hubiera vuelto herbívoros”…
¿Percibió, lector, el error de concordancia, que cometió a pesar suyo el querido galeno? Debió decir, pues hablaba en pasado: ‘si la naturaleza hubiera encontrado tan nociva la carne…’, no: ‘si la naturaleza encontraría’, ¡ojo con este error muy común, que atrae tantos otros!…
La expresión del médico es hipotética, (hipótesis: ‘suposición de algo posible o imposible para sacar de ello una consecuencia’); formula una hipótesis en pasado, que llamamos ‘imposible’ y traducimos así: como la naturaleza no encontró que la carne fuese dañina, no nos hizo herbívoros, sino carnívoros; o la naturaleza nos hizo carnívoros, porque no encontró dañina la carne para nosotros.
Vayamos lentamente: la hipótesis en presente elige, entre otras, la siguiente forma: Si la naturaleza encuentra nociva la carne, nos vuelve herbívoros. ‘Si la naturaleza encontrara nociva la carne, nos volvería herbívoros’ es hipótesis menos segura que la antedicha… Finalmente, ‘Si la naturaleza hubiera encontrado nociva la carne, nos habría vuelto herbívoros’ expresa correctamente lo que el médico quiso decir: que la naturaleza encontró, para nuestro bien o nuestro mal, sana la carne, para la carne humana.
Practiquemos esta norma en frases comunes: Si tiene tiempo, estudiará mañana. Si tuviera tiempo, estudiaría… Si hubiera tenido tiempo, habría estudiado… Si llueve, no saldrán. Si lloviera, no saldrían. Si hubiera llovido, no habrían salido. Si el lector se aburre, deja de leer. Si se aburriera, dejaría de leer. Si se hubiera aburrido, habría dejado de leer.
¿Terminó la lectura de este esbozo? ¡Espero que le sea útil! Y ‘tarde piache’ significa que ‘alguien llegó tarde a un negocio o pretensión’. Frase gallega, no italiana, significa ‘tarde piaste’ porque la pronunció un soldado que al tragarse un huevo empollado, oyó piar al polluelo, cuando este ya estaba en su mismísimo gaznate.
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