El llanto de los cachorros durante la noche es quizás uno de los problemas más frecuentes. Sin embargo, ignorarlo no es la solución. Foto: Wikicommons.
Criar a un cachorro probablemente sea una tarea difícil que demanda un trabajo diario. Tanto la familia como el nuevo integrante deberán adaptarse al hogar y a sus reglas.
Quizás el llanto durante la noche sea una de las primeros desafíos a resolver. Como primera medida, se deberá establecer cuál es su lugar para pasar la noche y tratar de que sea lo más confortable posible. También la ubicación deberá ser estratégica, ya que el cachorro querrá ver todo lo que está pasando, pero a su vez necesitará descansar tranquilo.
Contar con algunos juguetes así como su recipiente con agua será muy importante. Cuando comience con los llantos de noche, el consejo no será ignorarlo ya que el cachorro pensará que no está siendo escuchado y llorará con más fuerza. ¡A no desanimarse! Aquí presentamos cinco consejos que compartieron expertos de Petful, un sitio de consejos veterinarios, para educar a un cachorro.
Enseñarle a estar solo
Para eso, se recomienda dejarlo en una habitación, a veces durante el día, para acostumbrarlo a pasar tiempo por su cuenta.
Establecer una rutina
Esto servirá para que se sienta cansado antes de acostarse. Una vez que vaya a su espacio, se le deberá indicar que es momento de descanso y confort.
Ir al baño
Un cachorro puede mantener su vejiga durante una hora por cada un mes de edad (hasta 6 meses). Por lo tanto, un cachorro de 3 meses puede retener cada 3 horas -un poco más durante la noche-. Si el cachorro va a la cama a las 22:00, habrá que despertarlo a la 01:00 o 02:00 para ir al baño y luego otra vez a las 04:00 o 05:00 de la mañana.
El truco para que sigan durmiendo
Una vez que se lo acompaña al baño -el lugar higiénico para hacer sus necesidades- durante la noche, el truco es no hacer un alboroto. No hablarle ni encender las luces para que luego vuelva a su lugar de descanso sin decir una palabra. Esto ayuda a entender que es momento de dormir y no de jugar. En estas pequeñas paradas, se deberá ‘ignorar el llanto’.
Ayudarlo a que se consuele
Una forma es que tenga siempre a mano un juguete para masticar y que esté siempre cerca de la cama para evitar cualquier crisis durante la noche.