La rotación del disco duro tradicional puede influir en el tiempo de acción del procesador. La presencia de una Unidad de Estado Sólido puede influir sobre la temperatura del PC. Foto: EL COMERCIO

La rotación del disco duro tradicional puede influir en el tiempo de acción del procesador. La presencia de una Unidad de Estado Sólido puede influir sobre la temperatura del PC. Foto: EL COMERCIO

El disco duro es clave en la velocidad de la computadora

La rotación del disco duro tradicional puede influir en el tiempo de acción del procesador. La presencia de una Unidad de Estado Sólido puede influir sobre la temperatura del PC. Foto: EL COMERCIO

Cuando se piensa en la capacidad de almacenamiento de un computador, lo primero que viene a la mente es el disco duro. Cuando se piensa en la velocidad del computador, en cambio, lo primero en que se piensa es en el procesador o en la memoria RAM.

Es por esto que en el momento de hacer que un computador sea más rápido, lo primero que se suele hacer es ‘aumentar la RAM’. Sin em­bargo, el principal factor que influye en la velocidad de un computador es, paradójicamente, el disco duro.
 La razón está en la mecánica de funcionamiento.

El disco duro de un computador es similar a un disco de acetato: un motor mecánico, en conjunto con un electroimán, mueven un cabezal rotativo sobre el que descansan los platos magnéticos en los que se graban los datos que se van a almacenar (sistema operativo, documentos, música, etc.).

Estos datos son grabados y posteriormente leídos por una cabeza de lectura, también conocida como aguja. Es un mecanismo muy similar al que permite la reproducción de los discos de acetato. Y esto es justamente lo que hace que un computador se demore más o menos tiempo: en el momento de adquirir los datos requeridos, el cabezal debe dirigirse al sector del disco en el que están almacenados, y leerlos mientas el disco está rotando.

Es aquí donde se debe tener en cuenta, además de la capacidad de almacenamiento, las revoluciones por minuto (RPM) de un disco. Mientras mayor es el número de RPM, más rápido será el giro del disco y permitirá una lectura más rápida de dichos datos.
Como alternativa a este proceso de lectura, es posible instalar a un computador un disco de estado sólido (o SSD, por las siglas en inglés de Solid State Drive).

La principal diferencia está en la disposición de la memoria interna: en lugar de un plato giratorio, un SSD tiene varios módulos fijos de almacenamiento, similares a los que se encuentran en el interior de una memoria USB. 
Varias pruebas realizadas por el portal estadounidense web PCWorld mostraron una mejoría directa en el desempeño en computadores de diferentes marcas que fueron sometidos a pruebas de rendimiento en dos fases: primero, con sus discos duros originales y, posteriormente, con un cambio de la unidad de almacenamiento, conservando el mismo procesador, la misma cantidad de memoria RAM.


Uno de los factores determinantes tras la prueba fue la aceleración del arranque y del acceso a los datos en dichos computadores. Miguel Orjuela, country Manager de Colombia y Ecuador de Kingston, asegura que la aplicación de este tipo de discos no se limita exclusivamente al uso de computadores.

Varios centros de seguridad o de videograbación han optado por este tipo de almacenamiento para lograr un acceso más rápido a videos o datos guardados en sistemas consolidados de discos de estado sólido. Sin embargo, cada tipo de requerimiento tiene su propio tipo de almacenamiento, dependiendo de si es un uso corporativo, personal o de seguridad.