Antonio Valencia se encuentra en Ecuador y no precisamente para atender alguna convocatoria. Hoy, está en Guayaquil para dedicarse de lleno a su rol protagónico en las campañas de marketing de la telefónica Claro. Posar, reír y hasta hablar frente a una cámara ya no le cuesta tanto, como hace dos años. En esa época se inició su relación con la operadora, con la que debutó en el mundo del marketing y la publicidad.
Memorizar los diálogos es lo más complicado para el ‘7’ del Manchester United, cuenta Andrés Blum, gerente de Servicios y Mercadeo de la empresa, y quien es el encargado de contactar el jugador. A la hora de grabar, Valencia prefiere ser espontáneo y le gusta que le hagan tomas de lo que mejor sabe hacer, jugar al fútbol.
“‘Toño’ es sencillo, receptivo y puntual”, asegura Ricardo Martínez, director creativo de Veritas. Esta es la agencia de publicidad que participa en la producción. Incluso, indica, sonríe, bromea y hace sugerencias al equipo de producción que trabaja con él en la grabación. “Tenemos que entender que para muchas personas es difícil pararse frente a un cámara y más aún si se tiene a 200 personas alrededor. Ha evolucionado mucho, antes se notaba su timidez, ahora no”, agregó Martínez.
Tampoco es bueno para locutar. Pero eso no ha sido un impedimento para que el volante de la Selección, grabe frases y la producción le proponga diálogos cortos, para que el ‘Toño’ se sienta a gusto y el producto final sea un éxito. Una muestra de ese trabajo fue el comercial del ‘Rayo de Sucumbíos’, que fue grabado hace un año.
Este martes y aprovechando sus días de vacaciones en Guayaquil, Valencia cumplió una jornada intensa frente a luces y cámaras. Incluso, grabó una campaña para Unicef, con niños de escasos recursos económicos en barrios pobres.
A las filmaciones siempre lo acompañan tres guardaespaldas, también Juan Carlos Holguín y Pedro Romero, sus asesores.