Ismael Blanco en un ataque del Barcelona ante el Olmedo, el 27 de septiembre de 2014. Foto: EL COMERCIO
Rubén Israel es muy exigente a la hora de trabajar; más aún cuando los partidos que deben afrontar Barcelona, son seguidos. Tras la victoria ante Olmedo de Riobamba por 2-0, los amarillos volvieron el domingo 28 de septiembre a las prácticas.
El entrenamiento consistió en dividir al grupo en dos equipos; los jugadores que actuaron ante el ‘ciclón’ hicieron trabajo regenerativo, mientras que el resto del plantel hizo fútbol ante las reservas del club.
Los amarillos medirán el miércoles al Manta en el estadio Jocay a las 19:00. Por eso, Israel no da espacio para el descanso.
Desde la llegada de Israel al club -el 29 de mayo- los entrenamientos empiezan a las 08:30 y terminan a las 11:30. La mayor parte de este tiempo realizan trabajos de resistencia.
El uruguayo ordena ejercicios de potencia, circuitos aeróbicos y trabajos con pesas. Para él, una buena preparación física es fundamental cuando se busca el mejor desempeño.
Flexiones de pecho sobre cajones, trotes con peso en las piernas y piques cortos evitando obstáculos, forman parte de las rutinas coordinadas por el Nicolás Dos Santos, preparador físico.
Los jugadores se ejercitan en la cancha ‘Sigifredo Chuchuca’. Complementan sus rutinas con ejercicios en el gimnasio de la concentración.
Israel le ha dado constancia al juego por las bandas. Cristian Penilla y Pedro Velasco son los encargados de los desbordes en el cuadro amarillo. El complemento del trabajo de estos atacantes es Ismael Blanco. El delantero amarillo se ganó la confianza del estratega y ha marcado tres goles en cinco encuentros.
Las jugadas de pelota detenida también fueron fortalecidas por el cuerpo técnico que encabeza Israel. Ante Liga de Quito, en la fecha quinta, Matías Oyola anotó tras un tiro libre y lo mismo ocurrió en el gol de José Luis Perlaza, ante Olmedo.
Con prácticas de fútbol en espacio reducido, intenta que su equipo luzca compacto. Cuando el plantel no realiza los movimientos que solicita, paraliza las acciones de un ‘silbatazo’ y corrige los errores.
Israel está satisfecho con los resultados que han conseguido sus dirigidos. Asegura que Barcelona bajo su mando siempre mostrará un juego ofensivo, sin descuidar los espacios en defensa; es ahí donde se justifica el trabajo físico que realiza en la semana.
Él está convencido que este estilo de juego ubicará a los amarillos en la final del campeonato nacional, ante Emelec. “Barcelona es un equipo que invita a soñar” dijo el charrúa en la última rueda de prensa.