Roberto Carballes Baena (izq) celebra el triunfo contra el chileno Nicolás Jarry. El eslovaco Andrej Martin (der) venció al francés Corentin Moutet. Foto: EL COMERCIO
Roberto Carballes Baena juega un torneo ATP 250 de ensueño. El español se clasificó a las semifinales del Ecuador Open tras derrotar al chileno Nicolás Jarry por 3-6, 6-2 y 7-6.
El español, de 24 años, llegó la semana pasada con dos días de anticipación para jugar el cuadro de clasificación. Ganó sus partidos el sábado y domingo (3 y 4 de febrero del 2018) y llegó al cuadro principal. Ahora está a un cotejo de jugar la final.
En el partido de ayer 9 de febrero del 2018, que se disputó en el estadio central del Club Jacarandá ante unas 600 personas, Carballes Baena mostró mayor tranquilidad y concentración. No se salió del libreto, cuando su rival le enviaba la pelota muy alta y a la que no podía llegar por su corta estatura.
Hubo intercambios de pelota, donde el español jugó al mismo ritmo que su rival, y con la misma intensidad. Remató a las líneas e hizo que el rival se moviera de derecha a izquierda. También le enviaba la pelota muy cerca de la net, donde Jarry cometió tres errores seguidos.
El chileno ganó sin complicaciones el primer set, pero luego desdibujó su nivel de juego. Cometió errores no forzados que permitió a su rival romperle el servicio. En el sexto ‘game’, incluso, cometió una doble falta y falló en remate cerca de la net.
En el tercer set, los errores disminuyeron, cada tenista defendió con mayor acierto su servicio. Jarry capitalizó el poder de su servicio que llegó, en varias ocasiones, a los 200 kilómetros por hora.
Carballes Baena, sin tener lograr a imprimir gran velocidad a su saque, lo hizo con efecto hasta complicar al rival.
Tras el empate a seis ‘games’ se jugó la muerte súbita donde Carballes, además de fortaleza mental, mostró su experiencia. Jarry se puso adelante en el marcador 5 a 4. Tenía los dos saques a su favor. Si los defendía con sus potente saques, habría sido el ganador, pero se sintió presionado por su rival que jugó con mucha confianza y asegurando cada remate.
Carballes recuperó el miniquiebre y, a jugada seguida, rompió el servicio a su rival. Con el 6-5 a su favor, sacó para partido, y lo hizo. Terminó el partido y levantó sus brazos en señal de victoria y felicidad.
Hoy 10 de febrero del 2018 jugará el partido de semifinales, en el estadio central del club Jacarandá.
Roberto Carballes, de 24 años, inició su carrera profesional en el 2011 luego de ganar el título de Roland Garros, en la categoría juvenil.
Es la segunda ocasión que llega a semifinales de un ATP 250. Antes lo hizo en Casablanca, en el 2014. “Estoy feliz por esta clasificación, el partido sabía que era difícil porque es un tenista que saca con mucha fuerza había, que buscar la estrategia de cómo neutralizar esa fortaleza”, dijo el español.
Añadió que tenía que colocarse cinco metros atrás de la línea de fondo para poder responder a los saques de su rival. “En cambio, en mis servicios, buscaba ser más regular que fuerte y lo pude lograr”.
Si bien reconoció que su nivel de juego está en un buen momento, “jugar dos partidos de clasificación y otros dos del cuadro principal permiten lograr ritmo, pero también producen agotamiento físico, más en la altura de Quito donde la pelota corre rápido”.
Otro de los semifinalistas fue el eslovaco Andrej Martin, quien ganó al francés Corentin Moutet, 6-3 y 6-4. Moutet eliminó el jueves a Ivo Karlovic, en un vibrante partido. AhoramMartin juega hoy contra Carballes.
Ayer (9 de febrero del 2018) al cierre de la edición se enfrentaban el francés Gael Monfils y el brasileño Thiago Monteiro, por uno de los cupos a las semifinales.