Carlos Sánchez del River Plate anotó el único gol del partido ante San Lorenzo por la Recopa Sudamericana, el 6 de febrero de 2015. Foto: AFP
River Plate derrotó por 1-0 (0-0) a San Lorenzo en el partido de ida por la Recopa Sudamericana, a cargo de equipos argentinos, disputado la noche del viernes 6 de febrero en el estadio Monumental de Buenos Aires.
El uruguayo Carlos Sánchez (77 minutos) marcó el único gol del encuentro con un potente derechazo, que le permitió a los ‘millonarios’ quedarse con el triunfo en el primer encuentro entre los ganadores de la Copa Libertadores de América-2014 (San Lorenzo) y de la Copa Sudamericana-2014 (River) .
El desquite se disputará el 11 de febrero en el estadio Nuevo Gasómetro, de San Lorenzo, donde a River le alcanzará con empatar para quedarse con la Recopa, mientras que el equipo azulgrana debe imponerse por dos goles de distancia para revertir la cuenta, o bien por uno para igualar la serie y forzar un alargue de 30 minutos, y de ser necesario, la definición por penales.
En el comienzo, fue San Lorenzo el que estuvo a punto de sorprender, pero el charrúa Martín Cauteruccio no pudo dominar el balón muy cerca del área chica.
Sin embargo, esa primera aproximación fue solo un espejismo, porque pronto River tomó el control del partido y comenzó a generar muchas situaciones de riesgo.
El colombiano Teófilo Gutiérrez fue gran protagonista en ese segmento del partido, ya que tuvo varias ocasiones para poner en ventaja al equipo de la banda roja, pero no las pudo aprovechar.
El delantero de la selección colombiana estuvo a punto de anotar, primero con un cabezazo que obligó a una fantástica estirada del arquero Torrico, y del tiro de esquina inmediato, ‘Teo’ cabeceó y el balón dio en el travesaño.
Gutiérrez volvió a contar con dos ocasiones muy claras, pues recibió un centro desde la derecha y cabeceó dentro del área menor, pero su frentazo a quemarropa fue salvado por Torrico con los pies, y casi en el final, ensayó una ‘chilena’ de espaldas al arco que dio en el travesaño.
Mientras San Lorenzo no conseguía tener el balón y se veía superado en todos los sectores, River conseguía generar espacios con los cambios de frente, y desbordaba por los laterales con las proyecciones de Sánchez y Rojas, más la capacidad de Pisculichi para ‘bombardear’ el área visitante con centros que le generaban zozobra constante a Torrico.