El muro que se conoce como Machuco se esconde entre una llanura verde, un bosque y un par de casas. De él cuelgan sogas que funcionan como líneas de vida para los expertos y aficionados escaladores que lo visitan para practicar.
El sitio está ubicado en la comuna de Sigsipamba, a 1 hora y media de Quito o a 20 minutos desde Tumbaco. Hasta ahí acuden quienes desafían al vacío, en grupos o en parejas, y emprenden un reto cada 15 o 20 minutos: subir hasta donde la mente y el cuerpo lo permitan.
[[OBJECT]]La entrada cuesta USD 1,50 para quien practique el deporte, y 0,75 solo por el ingreso al lugar. En el sitio no se alquilan los equipos. Cada aventurero debe llevar lo necesario, aunque los requisitos principales son convicción y adrenalina.
No hay obstáculos para los inexpertos. La estructura de Machuco permite que los principiantes y hasta los más hábiles trepadores la suban. Así lo asegura Carlos de la Bastida, instructor de Vértigo Escalada. “Este deporte se trata más de una conexión con el entorno, de concentración mental”.
A lo largo del muro hay vías (como se denominan a las rutas de ascenso) de diferentes niveles de dificultad. Para subirlas también hay dos alternativas. La una se conoce como escalada en punta, que consiste en asegurar o chapar cada paso con cintas y seguros. La otra es el ‘tope rope’ que significa subir con cuerda y la ayuda de un asegurador (persona que da soporte desde el piso).
El calentamiento es fundamental para evitar posibles lesiones por resbalones. “Lo primero que se necesita es preparar al cuerpo. Estirar, de 5 a 10 minutos los hombros, brazos, dedos, cuello”, agrega De la Bastida.
Lejos del suelo, el desafío es con uno mismo. La fuerza se debe equilibrar en cada músculo del cuerpo que entra en acción. Seguridad en los antebrazos, manos, abdomen y pies para subir y sentir la satisfacción del logro.
“Yo pasé por varios deportes pero me quedé con este”, dice Marcelo Villalba. Él practica la escalada desde hace cuatro años y cada fin de semana acude a Sigsipamba. “Acá también se puede acampar y escalar durante todo el día”.
El equipo debe estar certificado
1. Las cintas y chapas se usan para escalar en punta y respaldar cada tramo de la vía.
2. La cuerda dinámica puede medir hasta 60 metros. Se utiliza según el tipo de ruta.
3. Los ‘gatos’ son los zapatos adecuados para escalar. Estos deben ajustarse al pie.
4. El casco es una pieza clave para las vías de mayor altura o para los principiantes.
5. En el arnés se ponen los seguros y se ata la cuerda o línea de vida. Es ajustable.