La ‘rotación’ de entrenadores en este año evidenció la falta de un proceso de trabajo continuo en Deportivo Quevedo y el club sufrió hasta el final por los apuros del descenso a la Serie B.
El cuadro de Los Ríos tuvo como entrenadores al paraguayo Raúl Duarte, al argentino Juan Urquiza y al ecuatoriano José Mora, exmediocampista de Barcelona.
Al inicio del año, el plantel afinó un presupuesto modesto, en relación a los equipos poderosos del torneo, con USD 2 millones.
Con esta cifra, el conjunto quevedeño inició la campaña con Duarte, quien logró la clasificación a la Serie A la temporada pasada.
Aun así, el estratega paraguayo no cumplió las expectativas por la falta de resultados positivos en su gestión en este año y renunció en agosto tras la goleada de 3-0 que el conjunto recibió ante el Deportivo Cuenca. Esto contrastó con el debut quevedeño con un empate en casa y una goleada de visitante en la primera y segunda fechas, respectivamente.
En búsqueda de soluciones, los directivos decidieron cambiar de estratega y también de jugadores foráneos. Así dejaron el plantel jugadores como los paraguayos Fulvio Duarte y Christian Espínola y el inglés Rohan Rickets. En cambio, al equipo llegó el atacante uruguayo Nicolás Vigneri, exatacante de Emelec.
Tras la salida de Duarte, asumió el argentino Juan Urquiza, pero apenas estuvo al frente del conjunto durante siete encuentros. Su salida reveló problemas internos en la institución que fueron lamentados por el estratega: “Cuando llegamos sabíamos del plantel que había, pero no las cosas que tenía el equipo dentro, no con jugadores, sino de otro tipo”, explicó el DT argentino al dejar el equipo.
Con ‘Pepe’ Mora, el equipo tomó algo de alivio, pero llegó complicado a la etapa final.
Los jugadores también evidenciaron esa angustia. Para aplacar los apuros de los últimos partidos del campeonato, los futbolistas recibieron incentivos económicos por parte de la dirigencia.
Sin embargo, esos incentivos no cambiaron en nada la suerte del equipo fluminense. Ayer tras caer con el Emelec, el equipo de la provincia de Los Ríos descendió y el próximo año volverá a la B, tras un año en la principal categoría. En en esa categoría, el equipo tendrá menos recursos económicos.