Portugal sin Ronaldo, a ciegas

Cristiano Ronaldo celebra una de las tres anotaciones que realizó ante Irlanda del Norte, el 6 de septiembre de 2013. Foto: AFP

Cristiano Ronaldo celebra una de las tres anotaciones que realizó ante Irlanda del Norte, el 6 de septiembre de 2013. Foto: AFP

Cristiano Ronaldo, jugador de Real Madrid. Foto: Archivo

Nunca desde los tiempos de Diego Maradona una selección presente en un Mundial dependió tanto de un solo jugador: es el caso de Portugal con Cristiano Ronaldo, Balón de Oro y astro del Real Madrid flamante campeón de Europa.

El hecho de que el sábado, brevemente, hizo fútbol con el grupo no disipó las dudas: la tendinopatía rotuliana en la rodilla izquierda sigue causándole dolor y hasta podría empeorar, por lo que está en fuerte duda su presencia ante Alemania en el debut del 16 de junio en Salvador de Bahía.

Ante esta perspectiva, se frota las manos por la satisfacción Nana Kwabu Bonsam ("El Diablo del Miércoles"), un brujo ghanés que desde hace tiempo viene haciendo una macumba para "agitar a los espíritus" y hacer que impidan a Ronaldo jugar.

No es una maldición desinteresada, ya que Ghana, su país, integra con Alemania y Estados Unidos el Grupo G y todos saben que sin Ronaldo en el campo de juego el equipo que dirige Paulo Bento tiene la brújula descompuesta.

Cristiano estaba mal desde antes de la final de la Liga de Campeones, pero la jugó pese a las preocupaciones de los médicos de la selección lusitana, y ahora la situación se dio vuelta: es Florentino Pérez, presidente del Real Madrid, el que pide a Bento que no lo haga jugar si no está "perfectamente bien".

Bento no necesita de esta requisitoria para haber ya decidido, cuentan sus allegados, utilizar a Ronaldo recién en el segundo partido del Grupo, el 22 de junio contra Estados Unidos, para después concentrarse sobre Ghana, que el 26 podría ser el cotejo decisivo para el acceso de Portugal a los octavos.

La angustia que provoca la situación de este Portugal dependiente en todo de CR7 se notó claramente en el amistoso del 6 de junio en Boston contra México: errático, sin juego y sin ideas, ganó 1-0 con gol de cabeza sobre el final de Bruno Alves.

"No hay garantías, por el momento, de que Portugal pueda ser protagonista", admitió "A Bola", que anota como agravantes las lesiones de otros dos puntales del equipo: el rudo defensor Pepe y el ordenado volante Raúl Meireles, además de los fastidios musculares de los atacantes Varela y Helder Postiga.

Portugal, el martes próximo, afrontará con Irlanda su test final en Nueva Jersey antes de volar a Brasil, y allí se verá si, ausente Ronaldo, Bento podrá hacer funcionar su esquema 4-3-3 al que sigue aferrado pese a la ausencia del astro máximo.

Contra México desplazó a Fabio Coentrao a la zona por izquierda que, del mediocampo hacia adelante, habitualmente ocupa Ronaldo, colocando a Andrés Almeida a sus espaldas y manteniendo a Joao Mourinho en posición central, con un resultado altamente insuficiente.

Solo Eduardo, que parece haber saltado a la titularidad en el arco desplazando a Rui Patricio y a Beto, Bruno Alves y en cierto modo Joao Pereira como marcador de punta, más el juvenil Vieirerinha en sus primeras armas en la selección (juega en el Wolfsburgo), han dado respuestas positivas: demasiado poco si Ronaldo no juega.

Partidos de Portugal en la ronda eliminatoria: - Alemania-Portugal: 16 de junio en Salvador de Bahía. - Estados Unidos-Portugal: 22 de junio en Manaus. - Portugal-Ghana: el 26 de junio en Brasilia.

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