Paolo Lorenzi tiene 35 años, nació en Roma y juega desde sus 7 años. En el 2009 ingresó en el ‘top’ 100 de los mejores tenistas del mundo. Foto: Vicente Costales/EL COMERCIO
Paolo Lorenzi tiene 35 años y vive sus mejores momentos en el tenis profesional. En Quito es el tercer mejor clasificado, se encuentra en el ‘top 50’ del mundo y llega de ganar con Italia la difícil serie de Copa Davis ante Argentina, en Buenos Aires.
Esa actuación, donde fue protagonista y apoyó con un punto decisivo, sigue patente y por eso ayer jugó con llamativas muñequeras con los colores verde, blanco y rojo, de su país.
El encuentro no fue fácil y con una enorme venda en la pantorrilla izquierda luchó cada punto, sin prisas, para doblegar al combativo australiano Matthew Ebden por 6-4 y 6-4 en 66 minutos de partido.
En el tenis como en la vida, Lorenzi va paso a paso. Cuando es consultado sobre su ‘ranking’ asegura que busca avanzar un peldaño a la vez. Si ahora está 46º en el mundo, la próxima semana quisiera llegar al 45º, en un afán constante de superación.
En septiembre del 2016 alcanzó su mejor ubicación en la ATP al escalar hasta el casillero 35º. ¿Cómo hace para seguir mejorando a los 35 años? Él responde que se cuida, descansa y duerme tanto como se entrena. Cree que a su edad lo más importante es no lesionarse, porque la recuperación es más complicada con el paso de los años.
Aficionado al club de fútbol Florentina, el tenista recordó que tras el triunfo de Davis ante Argentina, Diego Maradona, uno de los mejores futbolistas de la historia, se acercó al camerino a felicitarlos.
“Fue una serie de Copa Davis muy dura”, ratificó el tenista oriundo de Roma y quien tiene aplazados, de momento, sus estudios de Medicina.
Ayer, cuando el juego estaba 5-4 a su favor y hubo un momento de descanso, Lorenzi se sentó y colocó una toalla en su rostro. Se quedó así ese minuto de paralización, como serenándose para servir y adueñarse del primer set. Después de eso se levantó con más confianza y ganó la primera manga en exactamente 30 minutos.
Diestro, con el revés a dos manos, Lorenzi sacó bien ante Ebden. Así lo reconoció al final del partido y dijo que para hoy, 10 de febrero del 2017, en los cuartos de final, espera mejorar además su juego de fondo.
También quiere mantener la serenidad que transmitió en el campo de juego, que en el club Jacarandá de Quito es de color ladrillo.
El rival de Lorenzi será Rajeev Ram, de EE.UU., quien derrotó a Nicolás Kicker de Argentina por 7-6 y 6-3, en 1 hora y 19 minutos de juego.
La fortaleza física de Lorenzi se evidenció aún más al jugar otro partido, ayer mismo, en dobles con su compatriota Alessandro Giannessi. Esto generó que el público elogiara y aplaudiera sus virtudes.
Este viernes se disputarán los cuatro cotejos de cuartos de final. Las llaves son las siguientes: Thomaz Bellucci (Brasil) vs. Renzo Olivo (Argentina), Roberto Carballes Baena (España) vs. Albert Ramos–Vinolas (España).
La cuarta llave se definirá entre los ganadores de los juegos de Víctor Estrella (R. Dominicana) vs. Ivo Karlovic (Croacia) y de Federico Gaio (Italia) vs. Gerald Melzer (Austria). Estos estaban previsto disputarse anoche.
Ayer, en los cotejos de dobles, la dupla Horacio Zeballos (Argentina) y Julio Peralta (Chile) ganaron a Hans Podlipnik (Chile) y Max Schnur (EE.UU.) 6-3 y 7-5.