Miguel Ángel Perera y su faena de peso

El diestro Miguel Ángel Perera da la vuelta al rueda tras conseguir una oreja. Foto: EFE

El diestro Miguel Ángel Perera da la vuelta al rueda tras conseguir una oreja. Foto: EFE

El diestro Miguel Ángel Perera da la vuelta al rueda tras conseguir una oreja. Foto: EFE

Una faena completa del torero extremeño Miguel Ángel Perera consiguió poner de acuerdo al exigente público de Bilbao y consolidó una temporada magnífica del diestro.

Con casi lleno en los tendidos, se celebró el sexto festejo de las Corridas Generales en la Plaza de Toros de Vista Alegre. Se trata de una de las ferias más importantes del calendario taurino español.

Se lidiaron cuatro toros de Garci Grande y dos de Domingo Hernández, hierros fraternos, destacando el corrido en tercer lugar. Miguel Ángel Perera cortó una oreja mientras que tuvieron una buena actuación dos figuras de relieve: El Juli y Enrique Ponce.

Las crónicas que se escribieron una vez concluido el festejo califican de ‘cumbre’ de Perera a su actuación . Íñigo Crespo, en el portal Aplausos dice que la faena fue “extraordinaria, compacta, rotunda, reunida, intensa, de un encaje notable.
Toreando a cámara lenta, arrastrando la muleta”.

La faena de muleta la inició con el pase cambiado que se puede ver en la foto adjunta. Al toro de nombre Hechicero, del hierro de Garci Grande la autoridad le premió con la vuelta al ruedo. Pero cabe anotar que, como muy pocas veces sucede en la Plaza Vista Alegre, hubo unos pocos aficionados que pidieron el indulto del toro.

Perera se llevó una fuerte ovación y hasta dos vueltas al ruedo después del fallo a espadas en una labor que confirma su gran momento y que, de acertar con el acero, hubiera valido las dos orejas de ley del bravo ejemplar.

En el sexto de la tarde logró cortar una oreja tras otra labor de quietud y temple que convenció a todos los presentes.
Mundotoro resume el espectáculo así: “En un escenario sin par. En el cartel de la feria. Dentro de una corrida de matices buenos, una faena y un toro se fueron camino del olvido. En esta fiesta resultadista donde solo orejas y resultados dan titulares, una faena cumbre de Perera y un toro de vacas tuvieron el premio de dos vueltas al ruedo. Poco titular y final paupérrimo para algo tan grande.

Hubo una faena buena de El Juli con la zurda, otra torera de Ponce y hasta una última de Perera de ciencia y sutilidad y riesgo y capacidad del mejor Perera ante un toro normal. Otro faenón de dos orejas que el reglamento presidencialista dejó en una porque la espada cayó baja. Esta es la fiesta que tenemos. Resultadista. Tacaña. Rígida. Absurda. Tan absurda que lo sobresaliente saca la nota de aprobado ramplón.

En la mejor temporada de su carrera, se vio al mejor Perera hoy en Bilbao. Tarde de cuatro orejas, porque es imposible estar más rotundo, más macizo, más capaz, y torear más por abajo, más sometido, más largo y más templado a sus dos toros. Dos toros de buena condición pero dos toros muy distintos”.

En Burladero.com Lucía Fuente dijo: “Brindó al público Perera el tercero y clavó las manoletinas en la arena, citando al toro de largo y pasándoselo por la espalda hasta en seis ocasiones. Extraordinario el extremeño en una faena templada y cuajada, con grandes series por ambos pitones, a un toro que colaboró y humilló en todo momento. Pidieron algunos aficionados el indulto para el astado, pero terminó Miguel Ángel Perera matándolo al tercer intento y perdiendo los trofeos. Vuelta al ruedo para torero y toro”.

Al ser consultado por los periodistas el ganadero Justo Hernández dijo que el toro Hechicero, un castaño de 531 kilogramos de peso, “era de vacas”, esto es que debía ser un semental, valorando la petición de indulto que fue tímida y que finalmente no se concedió.

Suplementos digitales