Raúl Cabezas, gerente de Marketing de Céspedecuador.com dice que el negocio de las canchas sintéticas es rentable en el país. Sostiene que una inversión de USD 30 000 se puede recuperar en un plazo corto. La clave es promover correctamente el negocio.
Así fue como creció Futbolcity, uno de los primeros complejos con canchas de césped sintético en Quito. Después de 7 años, los socios Víctor Rubio y Xavier Castro tienen ya dos complejos: uno en la capital y otro en Ambato, con un total de 19 canchas.
Y el éxito, según Cabezas, radica en la buena promoción del negocio. Así es como también funciona la empresa paralela Céspedecuador.com. La firma invierte USD 10 000 al mes en pautar en Google.
El negocio de importar, vender y colocar césped sintético nació después de poner la primera cancha. ¿La razón? Tuvieron, según Cabezas, una mala experiencia con un proveedor de césped en Guayaquil. “No tenían material en stock y la cancha se completó con parches de diferentes tipos de césped”.
Ahora, la firma es una de las principales importadores de césped sintético. Anualmente importan entre 50 000 y 60 000 m2 de césped. El año 2013 fue el mejor de todos: lograron traer 102 000 metros.
Céspedecuador.com es representante en Ecuador de la marca italiana Limonta y de la china CCGrass. Aunque la primera tiene una fábrica en Europa, Cabezas confirma que ellos traen el césped elaborado en China por que los costos son menores. “Sabemos que la mano de obra en Asia es más económica”.
Eso sí, resalta que las características son similares, ya que sus proveedores son aprobados por la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA). Según la página web de ese organismo internacional, el concepto de calidad fue desarrollado para estandarizar las superficies artificiales en todo el mundo y para garantizar la seguridad de los jugadores.
La mercadería, generalmente, la importan cada seis meses, y se demora en llegar al país entre 45 y 60 días.
El costo de colocación oscila entre los USD 21 y 29, incluido el caucho y la arena, que son productos nacionales. El costo por preparar la superficie varía, dependiendo del trabajo que tengan que realizar los ingenieros civiles.
Pero como promedio, Cabezas asegura que para montar una cancha de indorfútbol se necesita una inversión de al menos USD 30 000.
Fernando Arroyo invirtió USD 25 000 para ponerse una cancha de fútbol sala, donde juegan equipos integrados por cinco personas. Sin embargo, él asegura que en un año de trabajo aún no ha logrado recuperar ese dinero.
“Creo que sería mejor si tuviera una para indorfútbol”, afirmó Arroyo. Según sus estadísticas, su cancha trabaja en un promedio de 30 horas al mes. Cada hora cuesta USD 40.
En la Gambeta, Andrés Ávila, propietario, asegura que mensualmente juegan entre 1 500 y 2 000 personas. Él, gerente general de Verde Sintético, también se dedicó a importar césped después de colocar su cancha, hace 10 años.
Su empresa importa entre 40 000 y 50 000 metros cuadrados de césped sintético al año. El valor, dependiendo de la marca y tipo de césped, oscila entre los USD 22 y 29. Verde Sintético trabaja con tres marcas: ACT Global, CCGrass y Desso Sports System.
Entre sus clientes también están los futbolistas profesionales Carlos Tenorio, Édison Méndez y Néicer Reascos. También han colocado césped en colegios y escuelas de Quito y en otras canchas del país.
2 000 PERSONAS en promedio acuden mensualmente a las canchas