Latvala ganó y escolta a Loeb en el WRC

El finlandés Jari-Matti Latvala (Ford Focus) se situó en el segundo lugar del Mundial de Rally tras ganar ayer el Rally de Nueva Zelanda por delante de los Citroën C4 de los franceses Sébastien Ogier (2º) y Sébastien Loeb (3º), quien continúa líder del certamen.El éxito de Latvala en Auckland le coloca a 36 puntos de la cabeza en la general, como principal perseguidor del alsaciano, gran favorito para el que sería su séptimo título consecutivo.El Rally neozelandés conservó la emoción hasta el final y las distancias fueron mínimas, con el joven Ogier, que era líder con 6 segundos de ventaja antes de la última especial, a poco más de dos segundos y con la frustración de ver escaparse el triunfo al final.Tras subir a lo más alto del podio, Latvala tuvo palabras de recuerdo para su compañero de Ford Focus y compatriota Mikko Hirvonen, cuarto en la clasificación del Rally y tercero en la general. “Puede que Mikko no haya tenido un fin de semana muy bueno, pero sé que pronto estará de vuelta. Si se presenta una nueva ocasión y puedo ganar por el bien del equipo, me encantará poder hacerlo. Lo más importante es la constancia, es indispensable para ganar”, comentó el vencedor.El perdedor del pulso final, Ogier, lamentó haber cedido el liderato justo al final, cuando parecía que tenía muy cerca su objetivo. “Nadie me robó la victoria, cometí un último error al final, pero en unas condiciones así, es algo que puede pasar. Intentamos darlo todo en la carrera”, dijo.Loeb tampoco estuvo acertado, en su intento de superar la desventaja con Latvala y Ogier, con lo que quedó tercero a 15 segundos, sin poder sumar su tercer triunfo en suelo neozelandés, tras los obtenidos en el 2005 y el 2008.“Hicimos un buen Rally para la clasificación general, así que no es una gran decepción. Ogier realizó un gran rally, dominó a todos el segundo día (sábado), desde hace unas carreras está ahí y se ve que hay que contar con él a partir de ahora”, señaló el alsaciano.Sin haber firmado ni un mejor tiempo en las especiales, Latvala selló su tercera victoria en el WRC, tras las de Suecia en el 2008 y Cerdeña en el 2009.

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